Abdicación
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00:00:0002:02El editorial de Pepa Bueno
De las palabras a los hechos
En una hora el nuevo Rey Felipe Sexto mantiene su primer despacho con el Jefe del gobierno, con Mariano Rajoy. Primera jornada del nuevo tiempo con una monarquía renovada según las propias palabras del Rey ayer en su discurso antes las Cortes generales. Empieza el trabajo para ganarse la confianza de los españoles. El nuevo Jefe del Estado tendrá este sábado su primer acto oficial, un encuentro con las víctimas del terrorismo, y la próxima semana visita Cataluña, para entregar los premios de la Fundación Principe de Girona. Su primer viaje al extranjero será a Marruecos. El día después de la proclamación es día para el análisis más calmado del discurso del Rey, un discurso muy contenido... en el que el mayor enfasis estuvo precisamente en la renovación de la propia institucion, prometiendo transparencia y ejemplaridad... un día, hoy, para constatar la madurez de nuestra democracia gracias sobre todo al esfuerzo de los ciudadanos españoles. Porque la ciudadanía, ese concepto tan civil como determinante, ya ha hecho una buena parte de su trabajo en su adaptación al siglo XXI. Esperemos que el resto de actores politicos y sociales esté a la altura del reto" Pero este viernes es también el día de vuelta a la cruda actualidad que hoy comienza precisamente por aquellos a los que Felipe Sexto se refirió en su discurso como "los españoles a los que el rigor de la crisis economica ha golpeado duramente hasta verse heridos en su dignidad como personas.
20/06/2014 | 02:02
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00:00:0001:24El ojo izquierdo
¿Es obligatorio decir que el discurso fue extraordinario?
Poca variación tenemos hoy, la verdad. El Mundo, por ejemplo, titula "Felipe VI: Una monarquía renovada para un tiempo nuevo". Y dentro, pues cosas esperadas, más o menos acertadas en lo literario, que de lo político nada decimos. Allí hemos leído que "La forma de hablar, de emocionarse al hablar de su madre, fue electrizante para el que se sienta español", según Jiménez Losantos, que debe pensar que los lapones, un decir, escupen a sus madres. No consigo hacer carrera con los gemelos univetilinos, que en cuanto me descuido duplican sus portadas. La Razón titula "Felipe VI de España", y Abc, "Felipe VI, Rey", que tampoco es para darles un premio a la originalidad en la titulación. Del discurso real, qué les voy a contar. En Abc comienzan por catalogarlo de excelente para seguir "con un canto a la integración de todas las almas de España y de los españoles que ha dejado sin argumentos a las voces del frentismo más recalcitrante, a los abanderados del sectarismo hiperdogmático y a esa docena de atrabiliarias cabezas que simulan que piensan, pero que en realidad desbarran". Ahí le han dado. ¿No le interesa a ningún oyente saber que el autor de este Ojo piensa que el susodicho discurso fue flojo por medroso y continuista, a años luz de una pretendida grandeza histórica? Pues entonces no se lo digo.
20/06/2014 | 01:24
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00:00:0003:14Cadena SER, audios extra
"Los reyes de cuento no existen"
"Bueno, esperemos que las cosas vayan a mejor". Luis Sepúlveda comienza así su reflexión sobre el nuevo reinado. El maquillaje de una ciudad, el cambio de rey no pueden ocultar lo mal que están las cosas, dice Luis Sepúlveda. El rey no tiene una varita mágica, ni tampoco le corresponde dar la solución.
19/06/2014 | 03:14
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00:00:0001:58La firma de Àngels Barceló
Un nuevo tiempo para recomponer la democracia
La directora de Hora 25 reflexiona sobre el discurso de proclamación de Felipe VI, un rey constitucional que llega a la corona en un momento difícil y en un país que siente la necesidad de dar pasos para recomponer la democracia.
19/06/2014 | 01:58
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00:00:0015:55Cadena SER, audios extra
Tres periodistas extranjeros y su relato de la proclamación
En la mesa, un periodista nacido en un país con honda tradición monárquica, el Reino Unido, y otros dos que provienen de países con tradición republicana: Francia y Venezuela.
19/06/2014 | 15:55
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00:00:0002:59El editorial de Pepa Bueno
Tiempo de renovación
España tiene nuevo Rey. Hoy comienza el reinado de Felipe VI. A sus 46 años, Felipe de Borbón y Grecia se enfrenta a la compleja tarea de buscar el lugar y la utilidad de la Monarquía en una España de inicios del siglo XXI que ya no es la misma que la de finales del siglo pasado. El nuevo rey accede a la jefatura del Estado en cumplimiento estricto de las previsiones constitucionales, sin la menor duda de legitimidad, respaldado por una amplísima mayoría de las Cortes votadas por los españoles hace menos de dos años. Hoy pronunciará su discurso de proclamación que será una oportunidad para que el nuevo rey deje claro que sus aspiraciones e inquietudes conectan con las de la sociedad española actual y que su reinado va a dirigirse bajo los parámetros de la austeridad, la transparencia, la honestidad y la ejemplaridad que requieren los tiempos y las sociedades democráticas. Y las fuerzas políticas y sociales han de entender desde el primer minuto que a Felipe VI no se le puede exigir lo que la Constitución no le permite hacer. Con su abdicación, don Juan Carlos ha dado el primer paso en la imprescindible renovación de las instituciones: renovación generacional, sí, pero sobre todo renovación en el modo de hacer las cosas. Ahora la responsabilidad recae íntegramente en las fuerzas políticas, que deben recibir el mensaje y ponerse manos a la obra ellas también. Necesitamos partidos más democráticos y transparentes; un modelo territorial renovado que dé encaje a las aspiraciones de Cataluña sin quebrar la igualdad entre los ciudadanos; una actuación creíble contra la corrupción; en definitiva, unas instituciones renovadas, y una clase política renovada. El compromiso de PP y PSOE con el pacto constit
19/06/2014 | 02:59
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00:00:0001:07Cadena SER, audios extra
A la espera de un discurso
Dentro de pocas horas tendrá lugar en el Congreso de los Diputados la proclamación de Felipe VI como nuevo rey y jefe de Estado. No se trata de una coronación en el sentido estricto del término, porque el acto no se relaciona con los símbolos de la monarquía (la corona y el cetro), aunque estén presentes simbólicamente, sino con la jura o promesa de obedecer la Constitución, que es la fuente de la que emana la monarquía parlamentaria española. Felipe VI comparece en el Congreso para formalizar su acatamiento de la Constitución y para que el Parlamento le proclame nuevo Jefe de Estado. Ese es el sentido de la ceremonia, y no ningún otro, tal y como corresponde a una monarquía parlamentaria. Formalizada la proclamación, el nuevo rey pronunciará un discurso, el primero de su reinado en el que debe esbozar ya algunas de las líneas en las que quiere inspirarse. Ya se ha comentado la conveniencia de que hable no solo en castellano, sino también en las otras lenguas del Estado, catalán, vasco o gallego, y sin duda habrá que estar atento a ello. Pero importa también y mucho fijarse en si incluye o no alusiones a una voluntad de mayor transparencia y rendición de cuentas y cómo interpreta el papel que fija la Constitución para el rey.
19/06/2014 | 01:07
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