Caravaggio, el enfant terrible del barroco
Según uno de sus biógrafos, Michelangelo Merisi llegó a Roma en 1592, "desnudo y extremadamente necesitado, sin una dirección fija y sin provisiones... y además corto de dinero". La economía de Caravaggio estaba al límite cuando conoció al pintor Próspero Orsi que le introdujo en el círculo de los grandes coleccionistas de arte, pero también en el mundo de los bajos fondos y las peleas callejeras romanas
26/09/2024 - 07:54
Jesús Callejo