Pesadilla de España en su debut en el Eurobasket
La selección española tropieza ante Georgia por 83-69

Joel Parra y Sergio de Larrea luchan por el rebote ante Georgia / GEORGI LICOVSKI (EFE)

Mal inicio de la selección española de baloncesto en el Eurobasket 2025 que pierde 83-69 en su debut ante la Georgia de Sandro Mamukelashvili y Toko Shengelia. Los de Sergio Scariolo fueron a remolque durante todo el partido y, pese al amago de remontada en los primeros minutos del último cuarto, La Familia sufrió una dura derrota en Limassol.
Una verdadera pesadilla para la vigente campeona de Europa que se vio superada en todo momento por una Georgia que, a priori, era de los rivales asequibles del grupo C.
España casi siempre estuvo por detrás en el marcador y tuvo problemas para frenar a Goga Bitadze o Sandro Mamukelashvili, que fue el mejor del encuentro con 19 puntos, 7 rebotes, 6 asistencias y 24 de valoración.
España empieza con mal pie
A España le costó entrar al partido. Tras tres ataques errando el lanzamiento, dos de ellos desde el triple, cambió de guion en ataque y aprovechó la calidad interior de Willy Hernangómez y Santi Aldama. Georgia apostó por un quinteto alto, con Sandro Mamukelashvili ejerciendo de 3 y una pareja de pívots formada por Shengelia, ya recuperado, y Goga Bitadze.
Los georgianos hicieron daño en situaciones de bloqueo directo gracias a sus hombres interiores, muy agresivos, terminando acciones cerca de la pintura. Incapaz de ajustar en defensa y tras cuatro pérdidas en la ofensiva —seis en total en este cuarto—, Scariolo se vio obligado a parar el duelo a mitad de cuarto con 13-6 en contra y reclamó más agresividad a los suyos en las situaciones de mano a mano de Georgia.
Aún con problemas para frenar al exbaskonista Kamar Baldwin y a Mamukelashvili, España pasó del 19-9 (min.7) al 20-17 al final de los primeros diez minutos, con ocho puntos procedentes de la segunda unidad.
En otro inicio trastabillado en el segundo cuarto, 'La Familia' volvió a chocarse contra el muro del equipo georgiano, que cerraba bien la zona e impedía cualquier intento de canasta fácil en el ataque estático. Sin embargo, no descuidó su tarea atrás y empató a 22 (min.14) tras un triple de De Larrea.
El empleo de tres jugadores con capacidad para generar al poste dio rédito a Georgia, que, a pesar de sumar personales en el casillero de España, vio cómo la selección se ponía por delante por primera vez en el partido (32-33) a falta de un minuto para el descanso.
Cinco puntos consecutivos de los de Aleksandar Dzikic, con un gran Sanadze, autor de 11, volvieron a dejar a los suyos por delante al final de la primera mitad (37-35), que acabó con Brizuela ejerciendo de base y anotando una bomba sobre la bocina.
Lejos de reencontrarse tras la reanudación, la selección española encajó un parcial de 5-0, encadenando tres ataques consecutivos sin encontrar la efectividad desde el 6,75 y mostrando muy pocas ideas para desarbolar la resistencia del equipo georgiano, que no era tan consistente en ataque.
Varias buenas defensas propiciaron canastas fáciles para España que, unido a una mejor versión de Aldama, fueron el argumento perfecto para no dejar de creer (46-44, min.25). En solo un minuto y medio, Georgia sumó un nuevo parcial, esta vez de 7-0, para volver a imponerse (53-44).
La Familia comenzó a perder la lucha por el rebote —35 a 22— y se dejó valiosos puntos desde la línea de tiros libres, lo que propició un marcador de 57-49 a falta de los últimos diez minutos.
Cinco puntos seguidos de Juancho Hernangómez, triple incluido, y una gran penetración de López-Arostegui obligaron a Dzikic a parar el partido a falta de 8:09 minutos con 61-56 todavía a su favor. Cuando más lo necesitaba Georgia, volvió a emerger la figura de Mamukelashvili, que mantenía a los suyos con acciones ofensivas de mucha calidad (67-58, min.35).
España se ahogó tratando de remontar desde el triple y descuidó el trabajo atrás, con un Bitadze que tomó el testigo de Mamukelashvili, el mejor con 19 puntos, 7 rebotes, 6 asistencias y 24 de valoración, en una Georgia que no se apiadó en los minutos finales y terminó el choque con un contundente 83-68.




