León come pollo mariposa
Desde que el Hospital Universitario de León renovó el diseño de sus menús infantiles, los niños ingresados comen un 20 % más y están un 30 % más contentos
Barcelona
Cuando en 2010 le preguntaron a 12 niños —algunos ya curados y otros aún en tratamiento— qué había sido lo peor de su paso por el hospital, no hablaron del dolor ni del miedo a la muerte. ¡Dijeron que lo peor de su experiencia había sido la comida! Una respuesta que, en el Complejo Asistencial Universitario de León (CAULE), marcó un antes y un después.
Los tristes menús hospitalarios fueron sustituidos por otros nutricionalmente idénticos, pero con una presentación mucho más atractiva: "En el arroz a la cubana, el arroz tiene forma de luna y el huevo frito, de estrella. Las dos tienen ojos, nariz y boca, y los rayos del sol son de tomate", explica Soledad Parrado, subdirectora de Gestión del centro.
"El pollo mariposa también tiene mucho éxito", añade la responsable del proyecto. "Es una pechuga de pollo a la plancha, pero decoramos las alas con guisantes o zanahorias. Y la tortilla de patatas, por ejemplo, la presentamos en forma de pollito que está picando hojas de lechuga".
Durante la presentación de los menús en la feria Alimentaria de Barcelona, Parrado ha dicho que el cambio de los menús infantiles solo ha precisado una inversión de "300 euros en moldes", pero los resultados se ven a simple vista: "¡Dejan las bandejas limpias!".
Al medir la cantidad de comida que vuelve a la cocina ha podido constatarse que los niños comen un 20 % más, llegando al 30 % en algunos platos. Una cifra similar a la del incremento en el grado de satisfacción. Y eso por no hablar del premio recibido en las IV Jornadas de Humanización de Hospitales para Niños, celebradas en 2011.
"Los padres están encantados y los niños también", explica Parrado. Tanto que empezaron a subir fotos de platos a sus redes sociales y, gracias al boca-oreja, el proyecto ha dado pie a la publicación de un libro, ¿Jugamos a comer? (Eolas, 2015), protagonizado por "Frulita".
Soledad Parrado señala que "no todos los hospitales pediátricos ofrecen menús parecidos, pero está demostrado que si los niños comen mejor, se recuperan antes, por lo que deberían implantarse medidas similares para los niños y para cualquiera que esté enfermo".
Carlos G. Cano
Periodista de Barcelona especializado en gastronomía y música. Responsable de 'Gastro SER' y parte del...