La calle de las Mantas y Joaquín Sorolla

València

Si al pasar por la calle de las Mantas y alzamos la vista sobre su número 4, nos encontraremos con un panel de azulejos que indica el lugar donde nació el gran pintor Joaquín Sorolla y Bastida. Pocos lo hacen, en realidad este conjunto cerámico pasa desapercibido. Esta placa cerámica fue instalada en 1978 por la vecina Falla de la Plaça Lope de Vega.

Hagamos historia de la calle de las Mantas. Recordemos que va desde la plaza del Mercado a salir a la calle de los Derechos o mejor como se titula ahora carrer dels Drets. Esta vía recuerda la influencia y actividad comercial del Mercado y las tiendas más relevantes. Allí se concentraron algunos comercios de mantas de gentes procedentes de la Serranía y los confines de Aragón. Vendían ropas de invierno tales como calcetines, gorros, bufandas y en especial las mantas. Me imagino que en esta calle no se pasaba frío. [es broma] Esto fue en un principio porque posteriormente estas humildes tiendas ampliarían su oferta a toda clase de camisería y otras prendas. Por ello se llamó también calle de Camisers. También recibió el título de Calle Nueva.

Uno de los comercios más famosos fue el de “Los Gatos”, que se especializó en mantas y colchas que pendían desde las ventanas a la calle como acción anunciadora y publicitaria de lo que allí vendían. También la tienda de “El Caballo” que mostraba en su fachada un corcel blanco indicador de su título.

El día 27 de febrero de 1863 nacería el que iba destinado a ser nuestro pintor más universal, Joaquín Sorolla y Bastida. Sus padres Joaquín Sorolla y Gascón y Concepción Bastida Prat tuvieron un establecimiento de tejidos en esta calle.

Dice Bernardino de Pantorba, biógrafo de Sorolla, que el pintor, cuando era ya famoso, se acercó un día a su casa natalicia y se llevo una baldosa que conservó siempre como recuerdo.

Recomiendo una visita a la estrecha calle de las Mantas. Y que el oyente, al entrar por la calle, alce la mirada sobre el número 4. No hay mucho que leer, la placa cerámica, escrita en valenciano, nos pone en aviso de que hace 160 años allí nació el maestro de la luz. Vale la pena recordarlo.