"Teníamos que salir corriendo para que no nos pillaran en la huerta": el periodista José Antonio Martínez Soler denuncia los abusos que sufrió en el colegio La Salle de Almería
"Escuchar a Alejandro Palomas me llenó de rabia", asegura
José Antonio Martínez Soler, tras contar los abusos que sufrió: "Hace 60 años no se podían denunciar esatas cosas porque tu familia se quedaba sin trabajo"
05:53
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1644935260_348_cut/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
MADRID
Después de escuchar el testimonio de Alejandro Palomas en Hora 25, el periodista José Antonio Martínez Soler ha publicado un artículo en La Voz de Almería y 20 Minutos explicando los abusos que él mismo sufrió de niño, a los 10 años, en el colegio La Salle de Almería. El texto, como era de esperar, ha tenido mucha repercusión y este martes ha hablado de ello en una entrevista concedida a Hora 14.
Más información
"Fui muy cobarde, lo tenía oculto en un lugar oscuro del corazón y no quería sacarlo", ha explicado. "Nunca fui capaz de contarlo, ni siquiera en mis memorias que saldrán en mayo. Pero mi chica, que es de Boston y también es periodista, me insistía en que tenía que contarlo. Seguimos todo lo que sacó el Boston Globe, vimos la película Spotlight... y escuchar a Alejandro Palomas me llenó de rabia".
Martínez Soler ha detallado que, en su caso, sufrió tocamientos y, cuando un fraile quiso masturbarle, salió corriendo. Pero no fue víctima de una violación.
"Que yo sepa, eran tres frailes de un total de 20. Teníamos que salir corriendo para que no nos pillaran en la huerta, en el teatro... En mi caso fue en el despacho del prefecto, pero cuando me tocó el pito ya salté y me fui corriendo", ha explicado.
El periodista ha señalado que al año sieguiente echaron a ese fraile, pero que él no pudo denunciar porque hace 60 años, con Franco en el Gobierno y un régimen nacional-católico, no se podía. "¡Tu familia se quedaba sin empleo!".
"Lo comentábamos con amigos, con una especie de risa nerviosa. Pero te queda un sentimiento de culpabilidad. Yo siempre he mandado a mis hijos a colegios laicos y creo que mis hijos se han librado de los abusos. Ahora creo que he hecho bien en contarlo, espero que sirva para algo. Pero el obispo de Tenerife sigue siendo obispo y dijo que los niños provocan a los curas", ha añadido.