Los barones se conjuran para forzar a Casado a firmar "de inmediato" la paz con Ayuso
Núñez Feijóo lidera la ofensiva de líderes territoriales que demandan el cese de Teodoro García Egea. Varios presidentes del PP consideran que la situación soló se solucionará con un congreso extraordinario y miran al barón gallego como alternativa. Los presidentes del PP más próximos a Génova no descartan que Casado y Ayuso busquen un acuerdo “muy pronto”
Madrid
Los barones y líderes territoriales del PP están intercambiando llamadas en las últimas horas. Coinciden en demandar medidas urgentes para atajar la crisis y que Pablo Casado ponga fin de inmediato a la guerra abierta desatada con la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso. La gran mayoría de presidentes secundan la petición que ayer planteó el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo: el cese del secretario general, Teodoro García Egea.
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“Aquí hay un conflicto muy intenso y el manejo de ese conflicto ha sido absolutamente desacertado. "Debemos actuar y el único que puede hacerlo es el presidente de mi partido", dijo este viernes en EsRadio el poderoso barón gallego. Para el líder de la Xunta, la presidenta madrileña y el líder de la oposición deben "sentarse solos, sin intermediarios, y dar una solución a ese problema al que los demás asistimos atónitos"
Son horas críticas para Génova porque varios presidentes del PP van más allá y agitan la amenaza de un congreso extraordinario. “Ya se ha pasado esa pantalla y no es suficiente con que Casado se deshaga de Teo (G. Egea). Casado no puede continuar porque si sigue las siglas se seguirán desgastando”, asegura un dirigente provincial.
Mientras, los presidentes del PP más próximos a Génova no descartan que Casado y Ayuso busquen un acuerdo “muy pronto”. Hay dirigentes populares que consideran que después de que Ayuso haya aportado documentación sobre el polémico contrato, Génova tendría una escusa razonable para dar por cerrado el conflicto. Desde el cuartel general popular hablan de “ruido” y restan importancia a la dimensión de la contestación interna.
Esperanza Aguirre, "estupefacta" por "lo que pasa en Madrid"
Esperanza Aguirre también se ha sumado a la petición del líder de la Xunta gallega y ha exigido la dimisión de García Egea, por haber llevado a esa formación "a la situación de crisis que viven", aunque, según ha dicho, se está "pensando" si también debería pedir la del presidente del partido, Pablo Casado.
Aguirre ha indicado que está "estupefacta" por "lo que pasa en Madrid". "La crisis más grave que he visto nunca, comparable solo con la crisis de UCD", ha continuado antes de informar de que hace meses que no habla con Casado. "El follón que ha organizado en el Partido Popular, la absoluta situación de no saber qué hacer, qué pensar, de nuestros electores, de militantes... es tremendo", ha relatado.
Aguirre ha insistido en que "Egea ya está tardando en dimitir" por la crisis abierta en el PP tras la denuncia de un presunto caso de corrupción de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en beneficio de su hermano. Si la dimisión de Egea no se produce, ha pedido que Casado "lo cese" por la gestión del partido en los últimos tiempos, pero, sobre todo, de esta crisis.
La expresidenta de Madrid se ha mostrado también muy contrariada por el contenido de la entrevista que Casado concedió ayer para hablar de Díaz Ayuso, en la que deslizó un presunto caso de tráfico de influencias en beneficio del hermano de la actual presidenta madrileña. "El señor Casado ha dicho cosas que no son ciertas", ha continuado Aguirre, quien ha asegurado que Casado y su equipo "han metido esta historia falsa de si Díaz Ayuso es corrupta" y les ha pedido que "no utilicen datos falseados". "Por Dios, primero entérese usted bien", pide.
Cuca Gamarra defiende un PP inquebrantable
Por su parte, la portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Cuca Gamarra, llama a “la responsabilidad, la lealtad” y a mostrar “unidad inquebrantable” para defender “la alternativa que España necesita”, al tiempo que ha asegurado que no teme que el Grupo Parlamentario Popular se fracture a cuenta de la crisis abierta entre Casado y Ayuso. Gamarra admitió que está viviendo “con preocupación” y “con dolor también” todo lo sucedido en las últimas horas en su partido, con una guerra abierta desatada entre Ayuso y la dirección nacional, que le ha abierto un expediente informativo por sus acusaciones en público contra Casado.
“Este grupo parlamentario tiene una grandísima misión que está por encima de nosotros mismos y somos todos perfecta y absolutamente conscientes de que lo más importante que tenemos es que los españoles necesitan sobre todo soluciones a sus problemas”, ha enfatizado. De igual modo, Gamarra sostuvo que los españoles “necesitan” al PP porque “tienen el peor Gobierno posible en el momento más complicado”. “Nos necesitan a su lado con propuestas e iniciativas que ilusionen y que nos lleven a alcanzar esa alternativa que España necesita. Y en eso es en lo que estamos y ahí hay una unidad inquebrantable”, ha asegurado.
Toma de posiciones
En Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, concentrado en lograr formar Gobierno, pidió ayer que la verdad se abra paso y verbalizó la "indignación y preocupación" de los "votantes, afiliados, alcaldes y concejales" ante esta situación.
Con el líder del PP sí se han posicionado Carlos Mazón, presidente del PP Valenciano, y Jorge Azón, recién elegido como presidente del PP de Aragón. Son dos de los nuevos nombres que el equipo de Casado sumó al organigrama del PP, tras un proceso de renovación en el que Génova se hizo con la mayoría de dirigentes provinciales.
En Andalucía, Juanma Moreno ha pedido unidad y en el PP andaluz eluden este sábado pronunciarse sobre los pasos que debe dar el partido para parar "la bola cuanto antes y no hacerla más grande". Moreno no es un fichaje de Casado. De hecho, Génova se vio sorprendida por su entrada en el Palacio de San Telmo.
Entre los pesos pesados, los dirigentes autonómicos, también son significativos los silencios, como el de Alejandro Fernández, líder del PP catalán, que esperaba ser relevado, o el de Paco Núñez, líder en Castilla-La Mancha, una plaza simbólica por ser la cuna política de María Dolores de Cospedal, secretaria general del PP durante una década.
También reina el silencio en Cibeles. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, negó el jueves que se hubiera espiado a Díaz Ayuso desde el Consistorio y evitó pronunciarse como portavoz nacional de su partido.
Mariela Rubio
Redactora de la sección de Política. Cubre la información del Partido Popular. Anteriormente fue redactora...