PSOE y Unidas Podemos rechazan el perfil centrado de Feijóo y creen que su prueba de fuego será Vox
Tras la predecible marcha de Casado, el líder del PP gallego se posiciona como el mejor colocado para asumir el liderato de un partido que debe gestionar el auge de la ultraderecha
El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo / Mario Guzmán (EFE)
Madrid
PSOE y Unidas Podemos creen que la previsible llegada del presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, a los mandos del PP no supondrá un giro al centro del principal partido de la oposición. Distintas fuentes de los socios de la coalición consultadas por la SER avisan de que no ven en el gallego la moderación que le arrogan algunos, y creen que la prueba de fuego será la relación que decida establecer con Vox, ante el auge de la ultraderecha.
En la izquierda han decidido por ahora no hacer sangre de la guerra abierta en el PP, pero los socios de la coalición sí han empezado ya a analizar el escenario que quedará tras el inminente Congreso extraordinario de los ‘populares’, y su conclusión es que la entrada en escena de Feijóo no tiene por qué frenar el acercamiento de los ‘populares’ a la ultraderecha.
Más información
Tanto en la dirección federal del PSOE como en la cúpula de Unidas Podemos se esfuerzan en rechazar ese perfil centrista de Feijóo. Fuentes socialistas denuncian que durante sus ya casi 13 años al frente de la Xunta ha impulsado duras “políticas de recortes”. Y los morados le definen como el responsable del “desmantelamiento de la red de servicios públicos”, especialmente de la Sanidad gallega, y además, señalan su falta de “ejemplaridad” mientras le recuerdan sus fotografías con un narco gallego.
Según el PSOE, el problema de fondo reside en que “en este país no existe el centro derecha”, y aunque desearían que ahora cambiaran las cosas, no creen que Feijóo vaya a asumir ese papel. Es más, los socialistas señalan que la renovación en el PP coincidirá en el tiempo con la previsible entrada de Vox, por primera vez, en un gobierno de los ‘populares’, en Castilla y León, si finalmente los de Santiago Abascal cumplen el objetivo que se han marcado, de facilitar la presidencia a Alfonso Fernández Mañueco solo a cambio de formar parte de su Ejecutivo.
Además, en el PSOE creen que el perfil de Feijóo tampoco es el más idóneo para frenar el auge de Vox entre la población mas joven; un motivo más que les lleva a pensar que el desembarco del gallego en Madrid no servirá de dique de contención al ascenso de la ultraderecha.
En Unidas Podemos señalan además que su alianza en la batalla del PP con la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, tampoco le aporta precisamente moderación. Algunas fuentes del partido morado consultadas por la SER admiten “gran preocupación” por el hecho de que esta deriva solo acabará dándole más alas a Vox.
En el sector morado del Gobierno también piensan además que el problema que tiene realmente el PP es que la ultraderecha está dentro del partido y que su proyecto es inexistente y eso, a su juicio, no se va a resolver simplemente con un liderazgo nuevo.
Con todo, ni en el PSOE ni en Unidad Podemos creen que sea buen momento para recurrir a un adelanto electoral para tratar de desarmar del todo al PP en este momento difícil para los 'populares', precisamente por el riesgo que existe de que la ultraderecha se empodere aún más.
El presidente del Gobierno ha vuelto a confirmar este miércoles, en su último ‘cara a cara’ con Pablo Casado en el Congreso, que no apretará el botón electoral, porque “España necesita estabilidad” y porque además no van a aprovechar la “debilidad” del adversario. “Queremos conseguir la confianza de los españoles basándonos en nuestro mérito y no en la debilidad de nuestros adversarios”, ha explicado.
