La comunidad ucraniana en Córdoba se concentra "con impotencia y preocupación" por sus familiares

Córdoba

Cerca de 25 personas de nacionalidad ucraniana se han concentrado esta tarde a las puertas del Pabellón de Deportes Vista Alegre de Córdoba para mostrar su rechazo a ofensiva militar que Rusia ha lanzado contra su país. La reducida comunidad en Córdoba del país de Europa del Este ha aprovechado el partido de clasificación para la Copa del Mundo de Baloncesto 2023 para mostrar su repulsa por la invasión comandada por el presidente de la federación rusa, Vladimir Putin.

Han entonado su himno nacional, intercalándolo con un 'Putin Fuera', mientras no quitaban ojo al teléfono, pendientes de la última hora que les retransmiten los familiares y amigos que están en su país natal.

Maksym Koliichuk llegó a Córdoba hace 15 años y se esperaba el movimiento de las tropas rusas. "Llevo varios días consultando medios locales de mi país y también lo que publicaban medios estadounidenses y españoles, lamentablemente las previsiones se han cumplido", lamenta. Rememora con angustia la mañana de este jueves, 24 de febrero, pues "lo primero que he hecho ha sido llamar a mi familia y amigos".

A la pregunta sobre cómo se encuentran, responde sentenciando un "vivos". En su región de origen, a 140 kilómetros de Kiev hay una base militar, así que se han sufrido bombardeos durante todo el día. "Afortunadamente no ha habido bajas civiles, a diferencia de en otros lugares", explica. Asegura estar "más nervioso que mi familia, porque no sé como ayudar, estoy haciendo donaciones y mandando todo el ánimo posible a mis compatriotas.

Caso distinto es el de Vasil y su mujer. Están apartados del grupo de protesta, esperando a entrar al partido. En inglés, detallan que "estábamos en España de turismo y hemos venido a Córdoba expresamente para ver el partido de baloncesto, sin esperar que esta mañana nuestro país entraría en guerra". Ahora, dicen, su plan en conducir hasta Barcelona mañana para tomar un vuelo a Polonia, desde donde planean "cruzar la frontera".

Su acompañante recibe un vídeo grabado por un compañero de trabajo. En la imagen, helicópteros rusos ametrallan posiciones estratégicas del ejército a escasos metros de domicilios civiles. "Tengo miedo", confiesa, al mismo tiempo que su marido dice estar "preparado para volver y luchar por mi país".

Otra compatriota, Anna Kostyuk, se emociona por "la sensación de impotencia que sentimos desde aquí". Por motivos económicos, se mudó a Córdoba 20 años atrás. Aunque admite vivir lejos de Kiev, la capital de Ucrania, "me preocupan mucho mis amigos". Sonríe por "todo el apoyo y el cariño que nos están demostrando desde España", algo que interrumpe Olga Vastyuk, amiga íntima de Anna, que asegura "haber recibido llamadas de todos los amigos que tenemos aquí".

Ahora, la comunidad ucraniana en Córdoba plantea organizarse por primera vez creando un grupo de Whatsapp, "para enviarnos ánimo, noticias y reivindicar la soberanía de nuestro país", sentencia Kostyuk.