El aumento del precio de fertilizantes y las importaciones de cereal principal preocupación en Segovia
El CEO del grupo Octaviano Palomo muestra su preocupación por cómo el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania afectará a las cadenas de suministro de la alimentación animal y la industria alimentaria
Pedro Palomo, CEO del grupo Octaviano Palomo, analiza como afecta el conflicto entre Rusia y Ucrania en la provincia de Segovia y la agricultura
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El conflicto bélico entre Rusia y Ucrania afecta a distintos sectores de la economía y está causando preocupación en el ámbito agrícola en la provincia de Segovia. Según ha explicado el CEO del Grupo Octaviano Palomo y presidente de la Cámara de Comercio de Segovia, Pedro Palomo, "esta situación tiene grandes consecuencias, porque va a subir la inflación que no es bueno para la economía de Segovia que es muy dependiente del tema agrícola".
Por un lado, Palomo analiza como afecta como afecta al ámbito cerealista teniendo en cuenta que Rusia es un gran exportador de minerales, y energías como el petroleo y el gas entre otras, pero también es el máximo exportador mundial de trigo. Mientras a Ucrania se la denomina 'el gran granero de Europa. "La producción de Ucrania puede abastecer a 600.000 millones de personas. El 75% de la producción de cereal de Ucrania se importa. El 40% de las importaciones que llegan a España vienen de Ucrania y eso afecta a las cadenas se suministros. En el caso de Segovia afecta a la alimentación animal, su industria y a la alimentación humana y tendrá un efecto en el aumento de los precios que se han disparado", argumenta Palomo.
Además de influir en un aumento de coste de las energías, la guerra también está afectando a los precios de los fertilizantes. Si los precios ya eran altos antes de la intervención de Ucrania debido al alto coste de la producción energética, ahora se han triplicado. "Rusia es uno de los principales exportadores de fertilizantes a la Unión Europea por lo que los costes para los agricultores van a seguir aumentando", comenta. Si a todo esto le sumamos la ausencia de lluvias y cómo esto puede afectar en la cosecha del cereal en la provincia de Segovia con una previsible reducción de la producción, Palomo concluye que es un momento de gran incertidumbre.