Vicent Marí reclama al Govern "respeto y lealtad" para Ibiza en el Día de Baleares

Ibiza

Respeto y lealtad son dos de las palabras que más ha repetido el presidente del Consell de Ibiza, Vicent Marí, en su discurso con motivo del Día de Baleares, que ha pronunciado a las 12 del mediodía en Sant Antoni, epicentro este año de las celebraciones de la 'Diada'. Marí ha vuelto a hablar un año más de autogobierno de las instituciones insulares y de contar con más competencias siempre y cuando estén bien dotadas económicamente. Porque ha asegurado que “sin dinero no puede haber una buena gestión de competencias ni de servicios”. Insiste en que seguirá reclamando el peso de Ibiza dentro de la comunidad.

Sin mencionar la Ley Turística, pero aludiendo a los últimos encontronazos con el Govern a cuenta de este asunto el presidente ibicenco ha asegurado que solo con diálogo y sin imposiciones se conseguirá mejorar en las islas y abordar problemas endémicos como el intrusismo en el transporte, en el sector turístico o actividades ilegales que proliferan por no contar con una legislación clara. En este sentido, también se ha referido a que no se cuenta con las normativas adecuadas para controlar por ejemplo la llegada de vehículos a la isla en determinadas épocas del año.

El presidente ha reclamado consensos que garanticen leyes que se adecuen a la realidad social y que sirva para impulsar "por encima de planteamientos partidistas, ayudas y soluciones efectivas a problemas que todos sufrimos". Ha añadido que "seguro que hay más cosas que nos unen que las que nos separan, pero extender la mano no significa poner la otra mejilla".

Marí ha dicho también que esta lealtad y respeto entre instituciones han sido protagonistas en la gestión de la pandemia. Una crisis que parece que se va remontando y de ahí que confíe en que haya una buena temporada turística como apuntan las previsiones. El presidente no se ha olvidado en su discurso de Ucrania. Ha mostrado su solidaridad con el pueblo de aquel país, con la comunidad ucraniana que vive en la isla y ha condenado la invasión por parte de Rusia, un ataque sin razón, porque, ha añadido, no se puede justificar la violencia contra los pueblos y las personas.