¿Nos ha decepcionado el rey emérito?
Deberíamos haber sabido leer entre líneas: "campechano", no tendría por qué habernos creado grandes expectativas"
Miguel Sánchez-Romero: "Juan Carlos I el Campechano"
Madrid
Una vez ha quedado demostrado que Don Juan Carlos no es inocente pero no puede ser declarado culpable, es ya hora de que regrese. Y rápido. No creo que permanecer en Dubái le haga ningún bien. Según he leído en prensa, uno de los amigos del rey en ese país es el traficante de armas hispano-libanés Abdul Rahman El Assir. Abdul está en busca y captura internacional por sus deudas con Hacienda en España y por haber sido condenado por corrupción en Francia. Una joyita. Lo que le hacía falta al rey. De un traficante de armas te puedes esperar todo lo malo. Incluso que no recicle. Es verdad que Don Juan Carlos tampoco es la persona que elegirías para que compartiera piso de Erasmus con tu hijo. A ti te llama tu hijo desde Brujas y te dice que su compañero de piso es el rey emérito y… tranquilo no te quedas. Casi prefieres que deje los estudios y busque trabajo.
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¿Nos ha decepcionado el rey emérito? Si la respuesta es sí, la culpa es nuestra. La trayectoria de un monarca suele quedar definida certeramente por el apodo que le tiene reservado la posteridad: Alfonso X el Sabio, un intelectual; Felipe el Hermoso, un pibón; Juan Carlos I el Campechano… Deberíamos haber sabido leer entre líneas. “Campechano”, de entrada, no tendría por qué habernos creado grandes expectativas. En Linkedin, sin ir más lejos, la campechanía esta igual de valorada que el nivel medio de Esperanto.
Miguel Sánchez Romero
Guionista y realizador televisivo español, Miguel...