¿Tienen los besos beneficios para la salud?

Madrid

Los besos son buenos para la salud. Lo hemos escuchado siempre y, hoy, que además se celebra el Día Mundial del Beso, la neurocientífica y Catedrática en Fisiología, Raquel Martín, lo ha confirmado en La Ventana. Son muchas las sustancias que produce nuestro cuerpo cuando damos besos. Entre ellas, oxitocina (que se genera con las sensaciones de apego) serotonina (que otorga calma y serenidad) y dopamina (placer que produce ganas de seguir besando).

Apasionantes, reconforantes, de pertenencia... Hay tantos tipos de besos como personas que los dan. "Cada uno produce un tipo de sustancias diferente", explica Raquel Martín.

Son menos, pero también hay quienes no dan besos. Se estima que alrededor de un 10% de la sociedad nunca se besa. Tiene que ver con la personalidad y, también, con las costumbres. Hay países, como Estados Unidos, en los que ese tipo de muestras de cariño no están en absoluto bien vistas. "Besar está como criminalizado", ha contado la escritora Azahara Palomé desde el otro lado del charco. Por el contrario, como ha señalado Martín, "los españoles somos muy besucones".

¿Qué pasa cuando no damos besos?

Cuando no nos damos besos podemos sufrir más estrés, pues se dejan de producir muchas de las sustancias que producen, entre otras cosas, serenidad y calma. En sociedades en las que no existe esa costumbre se producen menos acercamientos y menos lazos, según explica Martín. Bien es cierto que se encuentran otras fórmulas sustitutivas. "Se utilizan otras fórmulas como una palmada en la espalda, que puede producir algo similar", refleja.

Los que más lo notan, claro, son aquellos que, acostumbrados a los besos se mudan a una zona en la que están vetados o casi.

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La diferencia entre los besos y los abrazos

Sí existe, más allá de lo obvio, una diferencia a nivel hormonal entre los besos y los abrazos. En el abrazo, dice la experta en Fisiología, Raquel Martín, "hay mayor conexión". También mayor sensacion de "acompañamiento generoso", que tiene connotaciones de apego más profundas y placenteras.