Naciones Unidas ha documentado el asesinato de 50 civiles en la ciudad ucrania de Bucha, según ha anunciado este viernes en Ginebra la portavoz del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Ravina Shamdasani, durante una misión el 9 de abril en esta localidad cercana a Kiev. Los investigadores de homicidios de la comisión de la ONU han recopilado pruebas con las que han podido corroborar, por el momento, los asesinatos, incluidas ejecuciones sumarias, de al menos medio centenar de civiles. Shamdasani ha señalado que el Alto Comisionado constata evidencias crecientes de crímenes de guerra en Ucrania, en los que “las fuerzas armadas rusas han bombardeado indiscriminadamente áreas pobladas, asesinado a civiles y destruido hospitales y escuelas”, además de otras infraestructuras no militares. El pasado 29 de marzo, cuando las tropas rusas abandonaron Bucha, comenzaron a aparecer por sus calles los cuerpos de decenas de civiles muertos, aparentemente asesinados, cuyas fotografías conmocionaron al mundo. El presidente ucranio, Volodímir Zelenski, acusó entonces a Rusia de “crímenes de guerra”, tanto en Bucha como en otras poblaciones del país. La alta comisionada para los derechos humanos de Naciones Unidas, Michelle Bachelet, ha destacado en un comunicado la violación del derecho internacional ocho semanas después de la invasión rusa en Ucrania. “La ley humanitaria internacional no solo ha sido ignorada, sino totalmente abandonada”, afirmó la expresidenta de Chile. “Casi todos los residentes de Bucha con los que hablaron estos expertos denunciaron la muerte de uno de sus parientes, de vecinos o de otras personas”, subrayó. El alcalde de la ciudad ucraniana de Mariúpol, Vadym Boychenko, ha denunciado la existencia de una gran fosa común en la que han podido ser enterradas entre 3.000 y 9.000 cadáveres y ha mostrado imágenes tomadas desde un satélite por la empresa tecnológica Maxar como prueba de ello. La denuncia del alcalde se produjo poco después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, anunciara la toma de la ciudad. El alcalde de esta ciudad portuaria que los rusos dicen haber tomado por completo, mostró esas imágenes en su cuenta de Telegram: «En las fotos (tomadas) por Maxar el 9 de abril, el sector de la fosa común en Mangush (en el área de Mariúpol) es 20 veces más grande» que la de Bucha, explica el mensaje. «Putin está destruyendo a los ucranianos. Ya ha matado a decenas de miles de civiles en Mariúpol. Y esto reclama una fuerte reacción de todo el mundo civilizado. Algo tiene que detener el genocidio », dijo el alcalde. Con casi medio millón de habitantes, Mariúpol es el principal puerto en el mar de Azov y es clave en los intentos rusos de enlazar las autoproclamadas repúblicas prorrusas de Donestk y Lugansk con la ocupada Crimea Putin dijo ayer que cancelaba la orden de asaltar la acería de Azovstal con el argumento de salvar vidas, aunque manteniendo el bloqueo a la zona industrial. El líder del Kremlin sostuvo que no había «necesidad de meterse a estas catacumbas y arrastrarse en el subterráneo por esas instalaciones industriales», pero exigió el cierre de esa zona industrial «para que no pase ni una mosca, ni hacia dentro ni para fuera». Ucrania ha dicho que Rusia es «físicamente incapaz» de tomar la acería y el último informe de la inteligencia británica cree que la decisión de Putin pretende liberar fuerzas rusas para que sean desplegadas en otras partes del este de Ucrania, además de evitar «bajas rusas significativas». Rusia quiere controlar el sur de Ucrania, además del este, no solo para establecer un corredor terrestre desde el Donbás hasta la anexionada península de Crimea, sino también para crear un punto de acceso a la región separatista moldava de Transnistria, dijo hoy el jefe del Distrito Militar Centro ruso. «Desde el comienzo de la segunda fase de la operación especial, que comenzó literalmente hace dos días, una de la tareas del Ejército ruso es establecer el pleno control sobre el Donbás y el sur de Ucrania», señaló el jefe de esa entidad, general mayor Rustam Minnekéyev. Según este mando, cuyas palabras recogen las agencias rusas, este control permitirá a Rusia «establecer un corredor terrestre a Crimea y ganar influencia sobre instalaciones vitales de la economía ucraniana y los puertos del mar Negro que sirven para las entregas de los productos agrícolas y metalúrgicos a otros países». Además afirmó que el control de las regiones del sur de Ucrania dará al Ejército ruso acceso a Transnistria, región separatista prorrusa de Moldavia. Ucrania no abrirá este viernes corredores humanitarios debido al peligro en las rutas, informó hoy la viceprimera ministra y titular de reintegración de los territorios temporalmente ocupados de Ucrania, Iryna Vereshchuk. «Hago un llamamiento a todos los que esperan la evacuación: sean pacientes, por favor, aguanten», dijo Vereshchuk a través de Telegram. El jueves, las tropas rusas no cesaron el fuego, por lo que no hubo posibilidad de evacuar a la población del poblado de Vysokopilya y las aldeas de Novoznesenske y Mirolyubivka, en la región de Jerson, señala la agencia Ukrinform. Las tropas rusas tomaron además como rehén al presidente de la comunidad territorial, agregó. Tampoco fue posible abrir un corredor humanitario desde Mariúpol debido a los bombardeos.