Reino Unido alerta: muchos de los 72.000 británicos que viven en la Costa del Sol acabarán solos y aislados

Málaga

"Llegaron a Málaga para jubilarse. Se compraron una pequeña casita con sus ahorros. Con el paso de los años, se han ido quedando sin su pareja que ha fallecido y el resultado es que hay muchos británicos que se han quedado solos, y eso además les está aislando social y familiarmente". La advertencia llega de manos de la embajada del Reino Unido en España que ha pedido a expertos, como la catedrática de Trabajo Social y Servicios Sociales de la Universidad de Jaén, Yolanda María de la Fuente, que les preste ayuda y asesoramiento para buscar -junto a administraciones públicas como la Junta de Andalucía- el modo de auxiliar a sus compatriotas residentes en puntos como la Costa del Sol donde se localiza precisamente la mayor colonia de estos extranjeros en la región.

La situación de los británicos ha cambiado

Según explica De la Fuente en una entrevista concedida a SER Málaga "muchas de estas personas mayores -que llegaron a España en unas condiciones económicas más favorables- se encuentra ahora solas y en una clara situación de indefensión: según la normativa para los extranjeros residentes en nuestro país, ellos tienen derecho -como cualquier ciudadano- a acceder a todos los servicios públicos. La situación no es tan delicada en cuanto a la sanidad pero si en cuanto a los Servicios Sociales que prestan los ayuntamientos. Es muy triste. Se encuentran con muchas dificultades: la barrera del idioma, la complejidad burocrática, la falta de capacidad cognitiva, y con un aislamiento social y familiar muy preocupante. Es una población que necesita ayuda urgente", relata la catedrática.

El ejemplo de Mijas

La experta, también doctora en Derecho, admite que la localidad malagueña de Mijas, donde hay mas de ocho mil británicos empadronados, "es la bandera en la vanguardia en trabajar con esta población extranjera, son pro-activos ante las dificultades que tienen estas personas, y se implican para participar en la comunidad, pero quedan muchos más británicos que necesitan esa ayuda urgente". De la Fuente plantea, ante la enormes dificultades con el idioma, que se establezca una línea telefónica 24 horas de atención en su idioma "para informar, asesorar y orientar sobre el problema que tienen y donde hay que derivarles", añade De la Fuente.

"Necesitan un lenguaje fácil, comprensible para personas que, en muchos casos, tiene más de 70 y 80 años; que pueda reducir también la barrera burocrático a la que se enfrenten con trámites que requieren de muchos pasos que dificultan para ellos su ejecución o la simple presentación de un documento oficial ante una ventanilla administrativa", relata la catedrática. "Es que en mucha ocasiones se pierden con el simple hecho de pedir una cita por medio de una app electrónica, cuando ese trámite debe ser rápido y eficaz para este tipo de personas, no solo porque sean extranjeras, pasa con muchos mayores. Se ha generado una brecha digital que les ha dejado fuera", tal como explica esta catedrática.

Los ayuntamiento se tienen que implicar más

En este sentido, la catedrática considera que los ayuntamientos -la administración más cercana a todas las personas- "deben saber con detalle que población mayor y extranjera tienen empadronada, para a partir de eso momento poder actuar y aportar los servicios que van a requerir para su atención". "No se puede esperar a que las personas llamen: hay que ser pro-activo y desarrollar estas herramientas para que los mayores -y sobre todo extranjeros- puedan estar integrados en la sociedad y no aislados". La entrevista, al completo, con Yolanda María de la Fuente ya se puede escuchar en la parte superior de esta información.