La venta salpica: el Almería está roto
Turki apunta a irse y la plantilla está desquiciada

La plantilla no compite y el entrenador no dimite. / lALIGA

Almería
LA OPINIÓN DEL PARTIDO: Antes de viajar a Castellón y cumpliendo con la norma de cada rueda de prensa, el entrenador del Almería confirmaba lo que para todos es un secreto a voces: “De la venta se alguna cosa...”. Todo lo que se mueve alrededor de un cambio de propiedad salpica en toda empresa y en Almería nadie se acostumbra a que su equipo vaya rotando de dueño. Sería la cuarta propiedad desde 1989. Rubi, dice que se focaliza en lo deportivo pero todos son empleados del club y no saben a ciencia cierta lo que va a pasar cuando llegue la nueva propiedad. Los que están locos por salir lo tienen más fácil que aquellos comprometidos con la entidad que va a cambiar de dueño, si no se hizo ya. Si algo le faltaba a la temporada era que entrara en escena la salida del presidente más rico de la historia cuyo poder es enorme. Un Turki Al-Sheikh que le ha dado al Almería tiempos de paz y esplendor está cerca de poner punto y final a su etapa aquí. Con dos grandes obras por realizar y con una plantilla con contrato de larga duración aparecen las dudas. La venta salpica. El Almería está roto.
El partido de Castellón, como antes el del Cartagena, han venido precedidos de anuncios importantes que no pasan inadvertidos. La salud del vestuario salpicaba a las puertas de jugar contra el colista y antes de viajar a La Plana, el entrenador confirma sin pretenderlo los rumores de la calle y los convierte en noticia. La plantilla se juega mucho dinero cada temporada. Con Turki la hoja de ruta estaba definida pero los nuevos propietarios son lo bueno o malo por conocer, que dice el refrán tan español. El cuerpo técnico está seguro, los que quieren salir lo van a tener más fácil y los que prefieren acabar su contrato en el Almería, más complicado porque hasta conocer el proyecto toca esperar y conocer “cómo caza la perra” que decimos en esta tierra.
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Atención
La venta del Almería salpica y se vive en el vestuario. En Castellón se notaba que algo era diferente, los futbolistas andan desquiciados por el campo y su entrenador no da una a derechas. Los que viajaron sintieron vergüenza y los que lo siguieron por el Carrusel Deportivo mostraron su indignación. Algo saben en el vestuario que desconocemos porque no se entiende esta imagen desoladora del Almería. El entrenador no puede con ellos y su finiquito es imposible. No va a dimitir sabiendo que si se queda no habrá ni Play Off. Soluciones ya si verdaderamente se quiere subir a Primera.
Salir
Los jugadores que tienen compromisos adquiridos con otros clubes están de enhorabuena porque los nuevos propietarios deberán afrontar una limpieza en el vestuario si quieren ajustar un presupuesto racional. Hasta subiendo a Primera la plantilla es cara y toca bajar fichas y ajustar las cuentas. Lo de Turki empieza a ser historia y si la presión del límite salarial marcaba los tiempos, ahora el ajuste de cuentas parece claro, ya que los que entren después de pagar (si pagan) a Turki, necesitarán dinero como toda empresa para rentabilizar la inversión. La operación salida será activada por la nueva propiedad. Habrá limpieza.
Seguir
Los más identificados con el Almería y que viven bien en esta tierra deberán negociar en función de la categoría, y si es la Segunda lo harán a la baja. LaLiga meterá la tijera al límite salarial y no todos se podrán quedar por ganas que tengan. Ni la buena mano de Mohamed El Assy les podrá ayudar cuando de números se trata. Si el club se vende al entorno de Turki seguirán sus hombres fuertes en Almería, y si llegan otros compradores igual vienen con su personal de confianza para partir de cero en lo deportivo y en lo económico. El contrato no siempre es un aval.
Fijos
Lo único claro con la venta del Almería es que Rubi y su staff técnico sigue adelante porque firmaron tres años. No es la misma situación que a la llegada del ministro de Arabia Saudí que despedía de un plumazo a Óscar Fernández y ponía a Pedro Emanuel. El banquillo puede vivir tranquilo. No se entendería un desembolso a capricho, pero nadie conoce los planes de los compradores y todo apunta a que va a seguir el entrenador y su cuerpo técnico. Ni con el 4-1 de Castellón Rubi se ha planteado la dimisión.

Tony Fernández
Redactor de Deportes de SER Almería. Llegó a la SER en 1996. Antes, en RNE. Más de 40 años de experiencia...




