"Como lo decía Antonio..."
La firma de Juan Infantes en Hoy por Hoy Jerez

Jerez de la Frontera
‘Como lo decía Antonio…’
Un centenario no borra una voz cuando, como la de Antonio Gallardo, nació a ras de suelo. Él escribió desde la calle donde entonces el mosto transminaba noviembre. Nunca fue un poeta de estanterías, porque sabía de sobra que el verso, si no servía para acompañar a la gente en lo diario, era un mero adorno.
Medía y mecía la palabra sin perder nunca una gota de verdad. En sus letras cupieron la vendimia y el azahar, La Faraona y La Paquera, los ojos verdes y los grises, los cuatro capotes y como no, la Soledad…su Soledad. Y por supuesto, Jerez, en una esquina cualquiera donde la memoria se sentaba a tomar el fresco.
Siempre huyó del barroco. Prefería la claridad, la difícil sencillez, donde dejaba sitio al temblor humano, la gracia cuando tocaba y la hondura cuando dolía. Por eso, su obra sigue hoy en día funcionado, porque Tío Antonio susurraba al oído, sin gritos, con ese talante tan suyo que hoy echamos de menos.
En su feliz centenario, lo justo es volver nuestra mirada a lo sencillo: leerlo en voz alta, compartir uno de sus poemas entre amigos, dejar que su ciudad —que fue siempre su verdadera antología— nos lo devuelva. Y brindar discretamente, a su modo y manera, por quien hizo de Jerez un modo de decir.




