Estas son las claves de la Presidencia española en el Consejo de la Unión Europea, según una experta de la Universidad de Zaragoza
La catedrática de Derecho Internacional Público, Natividad Fernández Sola, analiza en Hora 14 Aragón los retos de la presidencia de España en Europa durante los próximos seis meses. Espera que se apruebe la directiva europea contra la violencia contra las mujeres y serán difíciles los avances en el pacto por la migración y asilo o en la política energética.
Zaragoza
Arranca la presidencia de España del Consejo de la Unión Europa, con vacaciones y convocatoria electoral mediante. Según Natividad Fernández Sola, catedrática de Derecho Internacional Público y directora del Grupo de Investigación en Estudios Europeos e Internacionales de la Universidad de Zaragoza, que sigue de cerca el desarrollo y la preparación de este medio año, "va a salir bien, con cambio de gobierno o sin cambio de gobierno" porque "los altos funcionarios han trabajado para ello". Fernández sí pide, en el caso de que haya cambio de gobierno, "una transición en la que nos entendamos todos".
A España, recuerda, "nos llaman la Alemania del sur", y ya ha estado al frente en otras tres ocasiones, la última en 2010. Con España se inicia un trío presidencial, que proseguirán Bélgica y Hungría, con prioridades que comparten entre los tres países y en las que deben estar de acuerdo.
En Aragón, se verá reflejada esta presidencia los días 19 y 20 de septiembre, cuando Zaragoza será la sede de la reunión informal dedicada a la Educación y a la Juventud.
La Guerra de Ucrania y las relaciones con Rusia
Entre las conclusiones del Consejo Europeo celebrado esta semana, el primer punto es el relativo a Ucrania y todos los estados miembros dan su apoyo incondicional este país. Como en otras ocasiones, impulsar la política exterior, la defensa y la seguridad y mantener en compromiso con la OTAN y la cooperación forman parte de estas prioridades.
De hecho, la primera parada del presidente Pedro Sánchez, ha sido en Kiev, como punto de partida de esta Presidencia. Esta guerra ha puesto en evidencia y ha acrecentado, por ejemplo, la dependencia del gas ruso. Desde que empezó el conflicto, recuerda Fernández Sola, "hemos ido reduciendo de manera drástica la dependencia del gas ruso" aunque, a la vez, remarca que "nos ha llevado a depender del gas licuado americano", por lo que "hemos reducido una dependencia, pero hemos generado otra".
Reindustrialización
Por eso, la reindustrialización es otra de las prioridades de la presidencia española, y garantizar la denominada "autonomía estratégica abierta" que, según explica la catedrática de la Universidad de Zaragoza, abarca "la energética, tecnológica, económica y sanitaria". Es un concepto que nos lleva, asegura a la "necesidad de reducir dependencias". Sin ir más lejos, esta misma semana, la planta de Stellantis, en Figueruelas, ha tenido que parar por la carencia de microchips.
Si embargo, también plantea una contradicción: "No deja de ser muy chocante que el objetivo principal de la Unión Europea es el libre mercado, entonces intentar ser autónomos, hacer nosotros en vez de comprar fuera, eso es un poco contradictorio con el espíritu de la Unión Europea".
La transición energética: un equilibrio complicado
Durante la presidencia española también se plantea avanzar en la reforma del mercado eléctrico. Además, la "excepción ibérica" para controlar los precios acaba en diciembre. Sin embargo, no todos los países está en la misma situación, con muchos intereses cruzados.
Una reforma del mercado energético que no es nueva, sino que viene de atrás. Se quiere cambiar el modelo, porque pagamos la factura
"aunque las energías renovables sean más baratas pagamos por el precio del gas, que es la más cara de todo el mix energético y España quiere terminar con eso, pero "hay países como Alemania o los nórdicos que no quieren cambiar el modelo, que dicen que no".
La catedrática de Derecho Internacional Público de la Universidad de Zaragoza plantea además que "estamos ante la paradoja tremenda de que España no tiene una conexión eléctrica todavía con el resto de Europa" sino que "hay una conexión mínima con Francia, muy pobre, y hay que decirlo con todas las letras: Francia no quiere que España esté conectada con el resto del mercado energético".
Pero, además, sostiene esta experta que Europa ha perdido progresivamente posiciones tecnológicas, que ha ido ganando China.
Pacto sobre migración y asilo
Esta es una patata caliente, la de la energía. Pero no es la única: Suecia le pasa a nuestro país el testigo de la presidencia del Consejo con el compromiso político de los estados miembros para reformar el pacto sobre migración y asilo.
Es difícil que haya consenso, porque las posiciones están muy alejadas, entre la frontera sur y los países del Norte, pero también entre Este y Oeste. España, Italia y Grecia piden repartir el esfuerzo. "No existe un acuerdo claro en los 27, sino que además hay algunos estados que tienen unas líneas rojas muy claras que impiden llegar a un acuerdo".
En lo que hay posibilidad de mayor avance será en las políticas de asilo. Al menos, señala, para "facilitar o al menos estudiar la movilidad de los demandantes de asilo o de persona que han obtenido ya asilo dentro de la Unión Europea. En esto se quiere avanzar".
Violencia contra las mujeres
Lo que sí parece que pueda salir adelante en estos seis meses será la Directiva Europea contra la violencia contra las mujeres porque, "no es un problema español es un problema de todos los países" y no hay diferencias entre los países.
Hora 14 Fin de Semana Aragón (01/07/2023)