El viento y el frío no puede con Os Andarines y la Jorgeada

Pese a las inclemencias del tiempo la Jorgeada ha sido de nuevo un éxito con la participación final de unos 900 participantes entre las cinco rutas que se han previsto. La climatología jugaba una mala pasada y obligaba sobre la marcha a modificar los avituallamientos y las rutas de los autobuses. Problemas que eran resueltos por la organización.

Los primeros andarines llegaban a Huesca sobre las seis de la mañana y los últimos, llegaban sobre a las 16 horas. Una jornada que es más que una andada ya que en palabras de José María Gállego, desde Os Andarines de Aragón, “es la fiesta de Aragón, es música, es gastronomía, es naturaleza y es convivencia”.

Gállego apuntaba que el frío ha provocado que varios andarines que tenían previsto hacer la larga hayan cambiado su intención a última hora por lo que se han tenido que cambiar sobre la marcha autobuses y rutas.

Este año además se rendía homenaje a Lorenzo Ortas como Jorgeador del Año. Un reconocimiento que cada edición otorga la organización a un deportista aragonés.

Sobre las 12 horas se plantaba en el cerro de San Jorge el árbol conmemorativo de esta edición, la número 23, y posteriormente se sube a la ermita para colocar a San Jorge la pañoleta de Os Andarines.