"No diría superar si no más bien integrar los hecho ocurridos en las vivencias de uno mismo"

Zaragoza

Cómo se afronta una muerte o la desaparición de un ser querido. Es a lo que se enfrentan ahora miles de valencianos tras los desastres provocados por la DANA en su provincia. La situación es dramática y, aunque depende de la persona, el trabajo psicológico es imprescindible tras esta terrible vivencia. Resolvemos estas dudas en Hora 14 Aragón con Sara Vidal, psicóloga experta en emergencias y catástrofes.

¿Por qué fases pasa una persona que vive de golpe y porrazo que sus familiares han desaparecido y horas después reciben la terrible noticia de que han muerto?

Cada persona es diferente y dependerá, entre otros factores, de las herramientas de afrontamiento que tengan de partida. Antes de encontrar al familiar o amigo que está desaparecido va a haber esperanza de que vuelva, se comunique, de que esté bien, incluso aunque la lógica nos diga lo contrario.

Una vez que se comunica esta pérdida, entonces, ya puede aparecer el estado de shock. Con esa explosión emocional, llanto, rabia, a veces hay gente que se queda paralizada. Después aparece la fase de duelo en la que sería habitual que se inicie o se pase por la negación con verbalizaciones como “no puede ser”. “Si me dijo que estaba en un lugar seguro, lo vi ayer, hablé con él”, muchas otras.

En una fase más avanzada habría que adaptar a vivir sin el ser querido. Habría que hacer una reconstrucción del yo. Es decir, quién soy yo sin esa persona, qué rol cumplo ahora. Hay mucha gente que ha perdido, por ejemplo, un esposo o una esposa. Su rol cambia, ahora va a ser viudo.

Las primeras horas de la Dana de Valencia, nos recordó a esas tormentas torrenciales que sufrimos en Zaragoza en julio de 2023 en la que se vivieron horas de tensión hasta que numerosas personas fueron rescatadas, pasando miedo, angustia, temer por su vida. ¿Se puede llegar a superar esta situación tan tantica?

No diría superar si no más bien integrar los hechos ocurridos en las vivencias de uno mismo. También hay que llegar al punto en que esos miedos irracionales asociados al estrés postraumático ya no duelan emocionalmente. Esto viene ligado también a que en los pueblos tienen que estar reconstruidos. Las casas tienen que estar bien. Las personas tienen que tener esa sensación de normalidad.

Lo ocurrido en Valencia nos ha conmocionado a todos. Es la mayor catástrofe que se recuerda en el último siglo. ¿Podemos extraer algún aprendizaje?

Siempre hay aprendizajes. Por ejemplo, los prácticos, que los equipos de emergencia aparezcan antes en el lugar de los hechos. Y trabajar la prevención. No sé si es aprendizaje o recordatorio, pero sí que es verdad que estamos en una sociedad obsesionada con tener más y más y nos olvidamos de que lo único seguro que tenemos es el hoy.