¿Qué hay detrás del consumo excesivo de benzodiacepinas?
El centro de salud de Tauste organiza mañana una jornada informativa para reducir su ingesta y concienciar sobre sus efectos

José Miguel Buñuel, médico del centro de salud de Tauste
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Reducir la ingesta de benzodiacepinas y concienciar a la población sobre los efectos que puede provocar un consumo descontrolado. Es el objetivo del centro de salud de Tauste ante el alarmante aumento de estos fármacos antidepresivos: un cuarto de los mayores de 50 años de esta localidad las consumen de forma habitual.
Es momento de hacer autocrítica. El consumo de estas pastillas, conocidas como sedantes o ansiolíticos para calmar la ansiedad o el insomnio, se ha disparado en los últimos años. Desde el centro de salud de Tauste, el médico José Miguel Buñuel apunta, entre otras causas, a la falta de tiempo en consulta. "Cuando has visto a 40 personas, un paciente te dice que no duerme y no tienes tiempo de preguntarle por qué. Acabas dándole algo rápido, que es muchas veces lo que te demanda, a pesar de que hay tratamientos que están dirigidos a otra sintomatología que no es el insomnio", explica.
Dependencia y tolerancia
Pero no es la única causa. Faltan recursos públicos, no hay consultas de psicólogos y psiquiatras disponibles a corto plazo y tampoco conciencia social sobre los efectos que puede provocar un consumo descontrolado. "Son fármacos que a la larga generan dependencia y tolerancia". Y ponen el foco en las personas mayores porque pueden "provocar deterioro cognitivo, problemas de memoria o aumentar la posibilidad de caídas y pérdida de estabilidad".
Explicar e intentar reducir su consumo será el objetivo de una jornada informativa este martes, a las 5 de la tarde en la Casa de Cultura, abierta a toda la ciudadanía.




