El edificio de Ibercaja inicia la segunda fase de las obras que lo volverán a convertir en la oficina principal en Huesca

Huesca

Desde hace ya unos cuantos meses, aunque hayan pasado casi desapercibidas, se llevan a cabo importantes obras de remodelación total en lo que fue el edificio de Ibercaja en el Coso Alto 41, el antiguo Palacio de los Oña, con el objeto de convertirlo de nuevo en Oficina Principal de Ibercaja. Acaba de terminar la primera fase de demolición de todo el interior, manteniendo tan solo los elementos arquitectónicos remarcables, y ahora llegará la fase de reforma interior. Cuando esté operativa trabajarán en ella unas 30 personas.

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Tras haberse mudado hace unos años a las oficinas de la antigua CAI, en el Coso Alto 11, finalmente se decidió dar marcha atrás y regresar a su ubicación inicial, un espacio que debe ser rehabilitado y adaptado, pero que en el entorno del Coso Alto y la plaza Inmaculada peatonalizados hace que los responsables, tal y como explicaba a Radio Huesca, el director provincial de Ibercaja, José María Coiduras, muestren su entusiasmo por la gran presencia que este edificio completamente renovado va a tener.

En la fase de demolición, en la que se han sacado todos los escombros por la parte posterior de Ibercaja, en la calle Loreto, tan solo se ha mantenido la estructura interior y exterior, respetando la gran escalinata, y los aleros del edificio.

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Lo siguiente es la fase de reforma, que se extenderá a lo largo de un año, por lo que es de prever que a finales de 2026 o principios de 2027, ya estén operativos en las nuevas oficinas. En este caso, se rehace todo por dentro para convertirlo en un banco adaptado a los nuevos tiempos. De hecho, ha habido que hacer una reforma integral con ascensores para facilitar la accesibilidad.

Lo que será la Oficina Principal de Ibercaja en Huesca quedará con una planta baja en la que se ubicarán los servicios de oficina, caja y atención personalizada. En la primera planta estará la Banca de empresas y Banca privada, además de numerosas salas de reuniones, para poder mantener entrevistas con los clientes. Y la última planta quedará diáfana, y servirá de multiusos, para usos internos. Hay que recordar que Ibercaja tiene en la provincia de Huesca más de 200 empleados, y en ocasiones necesitan espacios para reuniones o cuestiones de formación.