Fraga dejará de ingresar más de 300.000 euros con la liberalización de la AP-2

Con la liberalización desde este miércoles de la autopista AP-2, en la que se espera que los usuarios aragoneses se ahorren más de 90  de euros al año, los ayuntamientos por los que pasaba esta autopista dejarán de ingresar en concepto de IBI por los peajes. En el caso de la provincia de Huesca, ejemplo de ello es Fraga, que ya no contará con más de 300.000 euros anuales. 

Pero lo que de verdad "nos importa", reivindicaba su alcaldesa, Carmen Costa, es la seguridad en sus carreteras, ya que junto a la autopista se encuentra la N-2, uno de los tramos de mayor concentración de accidentes de Aragón; y con la liberalización de los peajes, se espera que se reduzca la siniestralidad.

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"En los últimos diez años, ha habido más de 60 accidentes en el tramo de la N-2 y creo que es el único sin desdoblar desde Barcelona a Zaragoza (...). Nos hubiera gustado que se hubiera construido una autovía como alternativa, pero la vida y la seguridad está por encima de lo económico (...) y habrá que ver cómo se distribuye el tráfico en este nuevo escenario y cómo afectará en la entrada y salida del municipio", añadía Costa.

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De esta forma, a partir de las 00:00 horas del 1 de septiembre de 2021, el Gobierno va a liberar en total 477 kilómetros de autopista de peaje. En concreto, 262 kilómetros de la AP-7 y 215 kilómetros de la AP-2 pasarán a ser gratuitos, tras concesiones de entre 47 y 55 años a las que se llegaron tras sucesivas prórrogas de hasta 26 años. En Aragón, la liberación de los 102 kilómetros de AP-2 supone un ahorro de 90 millones de euros anuales, se reduce el número de kilómetros de vías de peaje de un 19% a un 6% con respecto al total de vías de alta capacidad en esta Comunidad Autónoma donde, a partir de mañana, será un 76% más barato para el usuario.