Marc Anthony recupera los macro conciertos para Oviedo, que avanza un paso más hacia la normalidad
La organización espera congregar el miércoles en el Tartiere a 15.000 personas, ya sin restricciones por la COVID
Oviedo
Ahora que casi cada gesto cotidiano se ha convertido en un regreso "a lo de antes" del COVID, la celebración de un concierto de música pop -o de salsa, o de pop latino- en un estadio de fútbol, puede ser la prueba definitiva, hasta nuevo aviso, de la recuperación de la normalidad. Los que ya peinan canas recordarán con añoranza que hubo un tiempo en el que fue casi normal recibir en Oviedo -en aquel entonces en el antiguo Carlos Tartiere- a artistas de la talla de Michael Jackson o la banda U2 y en los que la mascarilla era atributo exclusivo de cirujanos o complemento de carnaval. El Tartiere de hoy es otro, pero de nuevo se llenará -si se cumplen las previsiones de la organización- sin falta de que el público se tape el rosto. El puertorriqueño Marc Anthony llega a Oviedo el miércoles 29, un año después de haber tenido que suspender el recital que precisamente hubo de suspenderse por las restricciones forzadas por la pandemia. Mientras en el césped del estadio de La Ería los operarios apuraban el montaje del escenario, en la grada, los organizadores agradecían que Oviedo sea ya la parada de su gira con más entradas despachadas en la primera semana de ventas. De hecho, tras el sold out en Barcelona, se espera también que el cantante llene por completo el Carlos Tartiere.
La cita promete ritmos latinos y mucho baile como ingredientes de un show por todo lo alto a su paso por Oviedo., en el que el ex de Jennifer López interpretará sus temas más conocidos, aunque se prometen sorpresas de última hora. El promotor del evento, Mateo Conde, asegura que el artista regresa con un show espectacular con una producción propia en la que lleva trabajando 2 años.
Oviedo fue de las 9 paradas en España la que más entradas vendió en sus 2 primeras semanas, unas 11.000 localidades y se espera que al concierto acudan entre 15.000 y 16.000 espectadores lo que supondría colgar el cartel de sold out.