El Principado concede autorización ambiental para la planta de reducción de hierro de Arcelor

Oviedo

Cuando la atención pública estaba centrada en el sorpresivo anuncio de la posible parada de uno de sus altos hornos de Veriña -a partir de la próxima primavera- el Boletín Oficial del Principado publicaba este viernes la autorización ambiental de la Consejería de Transición Ecológica para la nueva planta de producción de hierro en reducción directa, una de las patas del plan millonario de la multinacional para la descarbonización de las factorías asturianas. La autorización, por cierto, ha sido cuestionada ya por la Coordinadora Ecoloxista por haberse rechazado sus alegaciones sobre las emisiones y vertidos de la planta de Gijón.

Entre tanto el anuncio sobre la parada de uno de los hornos de Veriña, debido a la debilidad de la demanda y a la fuerte competencia extracomunitaria, se colado este viernes en la primera reunión, en este año 2024, del Consejo de Gobierno del Principado. A su término, el propio presidente del Principado, Adrián Barbón, ha afirmado que su ejecutivo sigue la cuestión "con interés". Barbón ha hablado de "una comunicación constante con la compañía" y de la esperanza de que el mercado no lleve a paralizar el funcionamiento del alto horno pese a la compleja situación internacional y el constreñimiento de los mercados. El presidente fue contundente al "asegurar que estamos en este tema de manera permanente y no solo en contacto con Arcelor sino también con el Ministerio de Industria".