Serenos Gijón, 25 años de guardia nocturna

Gijón

El servicio de Serenos de Gijón nació en el año 1999 en el marco de un plan de empleo dirigido a colectivos desfavorecidos. Hablamos, por ejemplo, de inmigrantes, mujeres o parados de larga duración. Como dato, Gijón se convirtió entonces en la primera ciudad española en recuperar la figura del sereno. Un servicio financiado fundamentalmente gracias a la aportación del Ayuntamiento, los comerciantes y las comunidades de vecinos.

Más de 500 trabajadores a lo largo de su historia

Actualmente el servicio cuenta con 44 empleados en activo. Sin embargo, han sido más de 500 los que han pasado por sus filas a lo largo de estos años. "El Servicio de Serenos ha generado cientos de puestos de trabajo y ha ayudado a miles de personas en Gijón", apunta su director, Lorenzo Pañeda. "Suponemos un punto de tranquilidad para los vecinos durante la noche", añade Pañeda sobre una labor que ha dejado anécdotas de todo tipo.

Momentos relacionados con asistencia sanitaria, alerta ante intentos de robo o llamadas a las Fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado ante peleas callejeras. El director se acuerda de una jornada en concreto en la que "un sereno salvó la vida de un inmigrante que acababa de llegar a la ciudad y se encontraba durmiendo dentro de un contenedor instantes antes de que éste fuera recogido por el camión de la basura".

Llueva, nieve o arrecie el viento, son la guardia nocturna de vigilancia de Gijón desde las once de la noche hasta las siete de la mañana. Aunque su papel ha variado mucho desde que entraran a formar parte de la sociedad, su condición de elemento tranquilizador de los vecinos durante las horas de más oscuridad permanece inamovible.