Pelayo Barcia: "Es ridículo imponer sanciones y al mismo tiempo seguir viendo camiones por La Calzada"

Gijón

El grupo socialista pide la dimisión del concejal de Movilidad, el forista Pelayo Barcia, por renunciar a las nuevas ayudas al transporte. Y esa negativa se justifica por el giro que según el gobierno municipal ha dado el Ministerio de Transportes al vincular estas subvenciones a una zona de bajas emisiones activa y con régimen sancionador. Gijón se desmarca de los nuevos requisitos y esta decisión tendrá consecuencias a medio plazo. Moverse en autobús por la ciudad será más caro a partir del 1 de julio.

Y estas ayudas, cuyo plazo de solicitud vence este 30 de abril, obligan a las entidades locales -aquellos municipios con más de 50.000 habitantes- a multar en la zona de bajas emisiones. El gobierno municipal dice que sin una alternativa al vial de Jove, "porque ese fue el compromiso de la mayoría de partidos en el anterior mandato", no procede imponer sanciones. A partir del 1 de julio, el viaje en autobús con Tarjeta Ciudadana o abonos pasará a costar el doble, con la excepción de la tarjeta CONECTA del Principado. El concejal socialista Tino Vaquero ha pedido el cese de Barcia porque, dice, su discurso negacionista tiene consecuencias y ésta es una de ellas.

En declaraciones a la SER, el concejal de Movilidad emplaza a la izquierda a explicar su "bandazo" en este asunto y considera "ridículo" imponer multas y al mismo tiempo seguir viendo camiones por la avenida Príncipe de Asturias en dirección a las instalaciones de El Musel. La renuncia a la petición de las ayudas estatales no afectará al presupuesto de Emtusa, insiste Pelayo Barcia. El Ayuntamiento de Gijón espera aprobar antes de fin de año la ordenanza que fijará las reglas para aplicar restricciones en la zona oeste. En definitiva, las normas y condiciones de acceso. Su activación estará sujeta a episodios ambientales.