'Amiganza', la primera asociación avilesina compuesta exclusivamente por personas mayores

Avilés

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), Avilés es la segunda ciudad más envejecida de España, solo superada por Ferrol, con la mitad de la población por encima de 51 años y una tasa de natalidad a la baja que estrecha cada vez más la base de una pirámide poblacional cuya franja más ancha se encuentra entre los 60 y los 64 años. En este marco y tras un intento fallido, surge Amiganza, la primera asociación en la historia avilesina integrada exclusivamente por personas mayores de 60 años -aunque se admitirán excepciones- .

Con una gestora al frente y aproximadamente un centenar de personas que quieren formar parte de esta iniciativa, Amiganza se pondrá oficialmente en marcha el próximo mes de septiembre con unos objetivos que van mucho más allá de jugar a las cartas o hacer excursiones como explica su presidenta en funciones, Cani Guardado (Avilés, 1948): "Queremos orientar y ayudar a las personas mayores, reivindicar lo que sea necesario y atender los diferentes problemas y sugerencias que nos lleguen. Tendremos un buzón para ello".

Y es que 'Amiganza' pretende ser algo más que una asociación lúdica o que organice excursiones y meriendas. "Más allá de actividades lúdicas, que son importantes y habrá algunas, queremos ser una asociación comprometida y solidaria. De hecho, nuestra primera actividad fue acudir al manifiesto de Maruja Torres contra el genocidio de Gaza.

Aunque las cuotas todavía no se han activado, a la espera de la aprobación de los estatutos, se prevé establecer un pago simbólico de unos 12 euros al año para el mantenimiento de esta asociación que tendrá su sede en un local del Centro de Mayores de Las Meanas. Desde este escenario, 'Amiganza' pretende ser un altavoz de las necesidades y problemas del colectivo de personas mayores. "Está la cuestión de la soledad no deseada que es una situación complicada.

Es importante que las personas mayores salgan de casa, se sientan partícipes y si es ejercitando el cerebro de alguna manera mucho mejor. Además, están las dificultades con las tecnologías con trámites bancarios o gestiones con las administraciones. Detectamos que hay personas que con los años se rinden ante las nuevas aplicaciones y creo que eso también es un error.

Estaría bien organizar cursos, aunque también tenemos claro, por ejemplo, que las comunicaciones de la asociación se harán también por correo ordinario, no solo por WhatsApp y correo electrónico. Al final, todo el mundo tiene derecho a enterarse de lo que hacemos, tenga o no presencia digital, y más en estas edades. También llamaremos la atención sobre la accesibilidad, que creo que es bastante mejorable en Avilés".