Que alguien se ponga a coser ese roto

'Vivir es fácil con los ojos cerrados'. Un título que se aviene como anillo al dedo a la difícil situación actual y que sin embargo es una deliciosa película de David Trueba que apuesta por la búsqueda de los sueños y la dignidad a pesar de las dificultades en la rígida España del franquismo, con protagonistas muy de carne y hueso que sueñan, ríen, lloran, se ayudan y superan como pueden sus propios desconciertos. Vivir es fácil con los ojos cerrados recibió anoche el Goya a la mejor película del año pasado. Fue la gran ganadora.

Como para el resto de los españoles, 2013 ha sido un año duro para el cine español que esperaba, por ley, recibir 100 millones de financiación pública y recibió 39, que ha sufrido la subida del IVA al 21%, el más alto de nuestro entorno, que acumula deudas, y espera y no llega una la Ley del cine. El presidente de la Academia, Enrique González Macho, pide a los cineastas que no pierdan la esperanza.

Y la guinda fue anoche la ausencia del ministro Wert. Por primera vez en 28 años, el Ministro de Cultura no acompaña a la industria del cine en su gran gala. Y sobre el escenario, lo recordaron, entre otros, David Trueba, Mariano Barroso y Javier Bardem.

Además de cualquier consideración de orden cultural, el cine español es una industria que emplea directamente a unas diez mil personas, indirectamente da trabajo a unas cien mil y junto al deporte de élite es el reclamo más evidente de la marca España a la hora de atraer inversiones.

Sólo un cerrilismo propio de otros tiempos y una soberbia ante las críticas incompatible con las responsabilidades de gobierno, explica el enconamiento de un sector del PP y la actitud del ministro con el mundo del cine. Urge de verdad que alguien se ponga a coser ese roto.