Sant Josep ordena a la dueña de Casa Lola derribar otra propiedad: Casa Paola
Tendrá un plazo de tres semanas y si no ejecuta los trabajos lo hará el Ayuntamiento de forma subsidiaria
Imagen del Ayuntamiento de una de las edificaciones demolidas recientemente en Casa Lola / Cadena SER
El Ayuntamiento de Sant Josep ha ordenado a la empresa dueña de Casa Lola, Inversiones Hoteleras Faro S.L., derribar las ilegalidades de otra de sus propiedades en Ibiza, Casa Paola, ubicada también en es Cubells. El Consistorio ha informado este jueves de que ha ordenado la demolición de varias construcciones levantadas sin licencia y que son ilegalizables al ubicarse en suelo protegido.
El decreto da un plazo de tres semanas desde la notificación a la propiedad, que se ha registrado esta semana, para dar cumplimiento a la orden de derribo. En caso contrario, el Consistorio lo hará de forma subsidiaria. El expediente de disciplina urbanística incoado el 2016 detalla que se debe derribar un volumen de 170 m2 y cuatro metros de altura, al parecer de uso residencial. También un aljibe de unos 75 m2, una piscina de 100 m2 y una construcción anexa de 150 m2 y posiblemente también de uso residencial.
En concreto, se prevé el derribo de casi 500 m2 a los que se tiene que sumar la zona exterior rellenada con tierra y áridos para construir nuevos bancales con una altura de un metro. Desde el Consistorio recuerdan que en las diversas visitas los celadores comprobaron que reiteradamente se incumplieron las órdenes de paralización de las obras ilegales. Por este hecho, se consideró a la empresa propietaria responsable de una infracción urbanística “muy grave” y se le ordenó la reposición de la vivienda a su estado anterior, además de advertir sobre la apertura de un expediente sancionador.
En la resolución, que da un plazo de diez días para audiencia a los interesados, se advierte a la entidad propietaria que el derribo subsidiario tendrá un coste de 105.546 euros. Sobre la demolición de Casa Lola, vinculada a la misma propietaria, a día de hoy ya se han derribado unos 2.600 m2 de construcciones ilegales, entre pavimentos, muros, paramentos exteriores y vallas perimetrales, que suman 6.700 m3 de restos de obra. También se han demolido otros 320 m2 de piscinas que se han desmantelado. Según informan los servicios municipales de Urbanismo, estos trabajos de demolición están a punto de acabar.
El alcalde de Sant Josep, Ángel Luis Guerrero, ha recordado que hace un año anunciaban que entrarían en Casa Lola “para restablecer la legalidad urbanística y acabar con los excesos que se han hecho allí y no todo el mundo se lo creyó”. “Hoy estoy seguro que cuando decimos que también haremos cumplir la ley a Casa Paola todo el mundo sabe que vamos de verdad”.
