" Yo creo que sí tenía gasolina para otro año más..."

Esta sí era la despedida que, Javier Aguirre, no esperaba, pero que merecía. La que se ha encontrado al entrar a la sala de prensa de Son Bibiloni y ver a toda la plantilla del RCD Mallorca, jugadores y cuerpo técnico aplaudiendo al míster durante unos segundos largos y emotivos para el mejicano.

En la previa de un Getafe vs. Mallorca, sin ningún contenido deportivo más allá del encuentro, la atención se ha centrado en escuchar al técnico mejicano que comparecía después de que no hablase en el apresurado acto del jueves en las entrañas de Son Moix.

Ha comentado con la voz rota que es la primera vez que le hacen esto en un vestuario, que se veía con fuerza y con ganas para entrenar un año más a esta plantilla y que entiende perfectamente la decisión de la dirección deportiva "soy un hombre de fútbol" que ha repetido tantas veces en estas dos temporadas y pico.

Nada más arrancar ha dicho, con la voz entrecortada:

"Es la primera vez que me sucede, en toda mi carrera es la primera vez que un grupo viene y me aplaude"

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"No paro de verlos y llorar, aunque no lo parezca, soy muy sensible y me cuesta mirarles a la cara y pensar que no nos volveremos a ver"

"Hoy decía que después de la semana tan difícil a nivel mental que pasaron estos chicos, es normal que estemos con los sentimientos a flor de piel, es un ciclo que se cierra y es bonito, creo que logramos algo"

"El plano emocional ha copado el protagonismo, pero en lo deportivo hay que destacar que no estarán ni Nastasic ni Van der Heyden ni Copete para un partido con poca trascendencia"

Son algunas de las frases del mejicano en rueda de prensa, en la que ha sido una rueda emotiva y atípica para despedir al técnico bermellón, que cerrará con su partido 97 oficial entre Liga y Copa mañana en Getafe.

Habiendo conseguido todos los objetivos que se marcaron al principio, incluida la final de la Copa del Rey que queda para el recuerdo del mallorquinismo.