"Es inhumano": la humillante carta que recibe la cuidadora de una persona dependiente en Canarias
En Canarias las personas dependientes tienen que esperar dos años hasta que el Gobierno concede el reconocimiento de grado. En muchos casos, las personas mayores y dependientes mueren antes de recibir una respuesta por parte de la Administración. Canarias sigue a la cola de toda España.
Reportaje: la muerte en vida de una cuidadora
10:08
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1653995005420/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Tenerife
Esperó durante dos años por el reconocimiento del grado de la dependencia para el familiar al que cuidaba. Nunca recibió respuesta de la Administración, hasta que su familiar murió, y solo entonces, once meses después, recibió la carta más humillante que ha abierto jamás. "La Dirección General de dependencia y discapacidad del Gobierno de Canarias me envió una carta para decirme que el expediente decaía porque mi familiar había fallecido", explica esta cuidadora. "¿Y durante todo este tiempo?", se pregunta. "Me responden dos años después de haber solicitado la dependencia y casi un año después de haberse muerto", lamenta.
Se hizo cargo de un familiar que vivía en otra isla de Canarias, se lo trajo a su casa aunque no tenía condiciones, -con todo el amor del mundo-, pero con sacrificios que le pasaron factura. Acabó tomando antidepresivos absolutamente abandonada por la Administración. "Cuando abrí la carta sentí una rabia tremenda e indignación absoluta", sentencia. "¿Esto qué es?, ¿para qué me mandan esto ahora?, ¿qué pretenden?, ¿quitarse de encima a todos los fallecidos para decir que las listas de espera están bajando?", se pregunta. Es la historia interminable de miles de cuidadores en Canarias. "Te hace revivir todo el proceso que has vivido, es terrible", añade.
"Llega un momento en que no sabes que hacer. Te ves sola y te supera"
Como tantas cuidadoras, tomó la misma decisión que habría tomado cualquiera, traer a su casa a un familiar que estaba solo en otra isla al que habían diagnosticado de una discapacidad muy grave. "Teníamos que tener cámaras en casa para que no se dejara la vitro encendida, o el grifo abierto. No lo podías dejar solo porque podía pasar cualquier cosa", explica. "Se despertaba por la noche, iba constantemente al baño, teníamos que estar constantemente despiertos, día y noche", añade. La situación se agravó y empezó a experimentar episodios de agresividad verbal y mientras tanto la Administración permanecía en silencio, sin dar una respuesta y sin ofrecer recursos para aliviar a la cuidadora.
"Llega un momento en que no sabes que hacer. Te ves sola y te supera", explica la cuidadora, a quien le llegaron a decir que pasarían años hasta que pudiera a optar a una plaza de residencia. En Canarias faltan unas 7.000 plazas públicas para personas dependientes en residencias. La dependencia es el asunto que más preocupación suscita entre la ciudadanía, que en 2021 presentó 3.671 quejas ante el Defensor del Pueblo canario en relación con las administraciones públicas, y al respecto el titular de la institución ha precisado que si se suman las demandas de años anteriores, actualmente hay 5.099 expedientes en trámite.
"Esto fue una hecatombe en mi vida, una especie de tsunami que de repente barrió mi vida. Pasé a dedicarme únicamente a cuidar a mi familiar y a buscar soluciones para él. Mi vida pasó a un segundo plano", es la historia interminable de miles de familias en Canarias que tienen que esperar hasta dos años para ser valoradas por el Gobierno. "Esto tiene que cambiar, tanto el modelo de residencias como este sistema de resolver el grado de dependencia y discapacidad tiene que cambiar. Es una vergüenza lo que está pasando en Canarias. Queremos que empiecen a actuar y que lo cambien ya, porque la gente no puede esperar más", concluye.
Javi Rodríguez
(La Palma, 1991) Periodista vinculado a la Cadena SER en Canarias desde el año 2009, apasionado de los...