José Julián Mena vuelve al PSOE tras su travesía por el desierto

Santa Cruz de Tenerife

Cuando faltan escasos días para retomar la actividad parlamentaria muy condicionada por las citas electorales, el PSOE pasa la resaca de la cita del comité de este sábado, un encuentro que no se producía desde el pasado mes de noviembre, que sirvió para escenificar la intención y predisposición de repetir candidatura a la presidencia del Gobierno canario de Ángel Víctor Torres pero también para comenzar a establecer el panel de candidatos en los ayuntamientos, hasta 25 de diversos municipios han expresado su intención de presentarse, en las Palmas de Gran Canaria suena el nombre de Carolina Darias, actual ministra de Sanidad pero también ,y esto ha dado mucho de que hablar, la vuelta del alcalde José Julián Mena, expedientado por el PSOE y cuya expulsión acabó en los tribunales con sentencia favorable para el edil. Así las cosas, Mena expresó su agradecimiento al partido en su intervención en el congreso: "Lo que quiero es pedir con ilusión y ganas, el apoyo. El apoyo inequívoco, como el que han demostrado al presidente, Ángel Víctor Torres pero también les pido el apoyo a Pedro Martín y no tengo nada sino agradecimientos y no tengo palabras sino de agradecimiento para el PSOE porque somos el partido de la gente y en este partido hay muy buena gente".

El desencuentro entre Mena y el Partido Socialista se remonta a 2020, cuando el grupo municipal se resquebrajó a raíz de la advertencia (y posterior denuncia) del concejal Luis García, quien aseguraba haber detectado indicios de presuntas irregularidades en el área municipal de Urbanismo. Esto acabó con la confianza del alcalde en el que hasta el momento se había comportado como un fiel compañero. El dirigente decidió entonces destituir al edil asegurando que se había excedido en sus competencias y responsabilidades.

La denuncia del concejal fue finalmente archivada en mayo de 2021 por la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife, que no observó ningún indicio de comisión de delito. Sin embargo, el escándalo político ya había desencadenado un expediente disciplinario y la posterior expulsión del PSOE tanto de Mena como de García en 2020. También había generado ya la división del grupo municipal entre los cargos que apoyaban a uno y a otro. Fue entonces cuando Mena se enfrentó al fuego amigo. Y es que el PSOE ordenó en en el mes de noviembre a sus 12 concejales promover una moción de censura contra el alcalde. Intento fallido.

La amenaza de censura fue calificada por Mena en la antena de Radio Club Tenerife como "una vuelta a las malas costumbres socialistas". El dirigente se mostró muy crítico tanto con la dirección insular y regional como la federal y confirmó su intención de seguir al frente del consistorio buscando nuevos apoyos para la gobernabilidad. "El PSOE no tiene un guion con el municipio, ni plan B", aseguró.

El alcalde quedó definitivamente apartado de las filas socialistas en enero de 2021, después de que el Comité de Ética de la dirección nacional del partido rechazara sus alegaciones. Fue entonces cuando recurrió a la única vía que quedaba a su alcance: la judicial. Comenzaba así otro periplo para José Julián Mena. Nueve meses después el pulso mantenido con el PSOE llegó a su fin.

La jueza Nidia Méndez consideró que el Partido Socialista había lesionado los derechos del alcalde, al no tramitar de forma correcta el expediente que supuso su expulsión. También se mostró en este sentido el Ministerio Fiscal, que aseguró que el documento disciplinario carecía de validez al no incluir la toma de declaración de los concejales del Grupo Municipal Socialista. La salida de José Julián Mena del PSOE quedaba anulada.