La Guardia Civil ordena la destrucción "de forma discreta" de 500.000 mascarillas caducadas

Las Palmas de Gran Canaria

La dirección de la Guardia Civil ha ordenado la retirada a un punto limpio de la forma más discreta y sin mostrar el contenido de las cajas del lote de mascarillas entregadas a la Comandancia de Las Palmas de Gran Canaria durante el pasado verano y cuya fecha de caducidad era abril de este año. Así se recoge en un oficio firmado por el comandante de apoyo, Gustavo Sánchez, enviado a cuatro compañías de Las Palmas con el asunto destrucción de mascarillas suministradas por el Ingesa por caducidad. En total se entregaron 500.000 cubrebocas, 300.000 de tipo FPP2 y 200.000 quirúrgicas, cuando sólo era obligatario en centros sanitarios, farmacias y transporte público. Ingesa es el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria dependiente del Ministerio de Sanidad y distribuidas desde Barcelona por la empresa Logista Pharma.

La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) había denunciado en abril la caducidad de las miles de mascarillas entregadas a los agentes y que" la falta de control en esta entrega fue de tal calibre que se llegaron a adjudicar a Unidades de la Guardia Civil mascarillas de tipo FPP2 cuyo destino real era el Centro Penitenciario Las Palmas, sito en el Salto del Negro, de Las Palmas de Gran Canaria", aseguró el colectivo de agentes en un comunicado.

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Y advertía que en base a esta orden dada por el Mando de Apoyo, se repartieron miles de estas mascarillas entre diversos organismos y entidades, como se acredita por ejemplo con la nota de prensa emitida por la Guardia Civil de Las Palmas el 19 de enero de 2023 de la cual se hizo eco en la cuenta de Twitter o en Facebook de la Guardia Civil de Las Palmas, en las que se observan fotografías de distintos guardias civiles haciendo entrega de las mismas a Centros de Mayores, de Refugiados e incluso a una concejalía de un ayuntamiento del Sureste de Gran Canaria.

El portavoz de la AUGC en Las Palmas, Juan Couce, aseguró que "hemos tenido conocimiento es que ahora lo que quieren es destruirla en un punto limpio. No entendemos cómo se va a cumplir la normativa de residuos cuando las mascarillas vienen embaladas en plásticos, tienen metal y papel, no entendemos cómo la Guardia Civil ha tomado esta determinación".

A Couce le sorprende que aparezca en esa orden la urgencia de deshacerse de manera "discreta" esas mascarillas fuera de uso. Ante esta situación la Asociación Unificada de la Guardia Civil piden explicaciones a la dirección General de la Guardia Civil por el método en el que se quiere destruir ese material y los motivos por los que se insta a que se haga de forma discreta.