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Sociedad | Actualidad

Canarias, asfixiada: "Los ventiladores están agotados, ya no se consiguen en las islas"

Profesores y padres piden medidas extraordinarias en los colegios para sortear la décima ola de calor del año en pleno mes de octubre

Canarias afronta este miércoles en aviso naranja por calor una jornada atípica de otoño que ha comenzado con los termómetros marcando 36 grados ya desde la madrugada. En la imagen, un termómetro a 37 grados junto al faro de la playa de Maspalomas (Gran Canaria). / Quique Curbelo (EFE)

Las Palmas de Gran Canaria

La semana comenzaba para muchos ciudadanos canarios sin poder conciliar el sueño. Las altas temperaturas lo ponían muy difícil. En municipios como Mogán (Gran Canaria) se alcanzaban los 35 grados. El fuerte calor, acompañada de la calima, se mantuvo durante el día con termómetros que superaron los 37 grados. Unas temperaturas tórridas que está teniendo consecuencias, no sólo para aquellas personas que trabajan en la calle o el campo, también para miles de alumnos en colegios de las islas que no están preparados para tantos días de altas temperaturas. Profesores y padres de los alumnos piden medidas a la Consejería de Educación para evitar estas precarias condicioens en las aulas, el Gobierno canario estudia un protocolo para aplicar en los centros de enseñánza ante este tipo de epidosodios, cada vez más largos y frecuentes en las islas.

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Calor insoportable con temperaturas muy por encima de los 30 grados en muchos colegios sin aire acondicionado y en algunos centros, escasos de sombras. Un déficit en las infraestructuras que va más allá del calor, según la vicepresidenta de la asociación de Ampas Galdós, Mariam Alvarez, que rechaza la suspensión de clases presenciales por altas temperaturas. "Mandar los niños a casa no nos parece la solución. Cómo los vamos a atender, si nosotros tenemos que trabajar o tenemos otras responsabiliades. En estas circunstancias el Servicio Canario de Salud derive personal sanitario a los centros educativos que estén más afectados", afirmó.

Aulas sofocantes

Los docentes piden que ante estos fenómenos meteorológicos extremos se retomen las clases a distancia, como ocurrió durante el confinamiento por la pandemia. Soraya martín de del Centro público de Playa de Mogán cree que se pueden aprovechar los medios técnicos que ya hay. "El alumnado no está saliendo al patio por lo que son cinco horas en el aula. Los niños lo notan, están más nerviosos, incluso algunos han llegado a sangar por la nariz por las altas temperaturas o se encuentran más fatigados", aseguró.

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Los profesores buscan soluciones para evitar que el fuerte calor irrespirable que se vive en las aulas pueda afectarles a su salud. Andrea Fernández, profesora CEIP Llano de las Naciones, en San Miguel de Abona, en Tenerife, asegura que los docentes están constantemente comprobando si los niños están suficientemente hidratados. "Comprobamos que tengan agua en sus botellas, incluso hemos tenido que salir al supermercado cercano a comprar agua fresca porque la que sale de la fuente del centro está ardiendo, con spray rociándoles por encima para que se refresquen lo más posible, sobre todo entre los niños más pequeños.

Desde la Consejería de Educación aseguran que se está confeccionando un protocolo basado en el que ya existe en Andalucía para afrontar estos días de altas temperaturas. El vicenconsejero de este área del Gobierno canario, José Manuel Cabrera, contempla la posibilidad de adecuar horario o evitar actividades en el exterior. Unas medidas que podrían estar disponibles antes del próximo verano para poder aplicarlas en cualquier momento del año cuando se registren episodiso de calor extremo como viene ocurriendo con mayor frecuencia y tiempo.

Otro ejemplo de los efectos del calor extremo en el interior de edificios públicos lo conocíamos en la SER. La madre de Antonio, de cerca de 90 años, sufrió un golpe de calor dentro del Hospital universitario Doctor Negrín de Gran Canaria donde estaba ingresada por otras dolencias. Como explicaba que el aire acondicionado no se notaba casi en las habitaciones, ni en urgencias ni en planta, algo que a su juicio no es comprensible sobre todo con las personas más vulnerables. Para este familiar de esta paciente "da la sensación de que son medidas para el ahorro del consumo de energía, pero si tenemos gente hospitalizada y nos estamos gastando un dineral y encima permitimos que les den casos de golpes de calor, sufriendo mucho e incluso perdiendo la vida, pues no es de recibo".

Agotados los ventiladores

Mientras tanto la demanda para la compra de ventiladores o aparatos de aire acondicionado se triplicó en junio con la llegada de la primera ola de calor y ahora es casi imposible conseguir este tipo de productos en las tiendas. Según Sergio Rodríguez, gerente de Mediamarkt del centro comercial Las Arenas en la capital grancanaria, estos dispositivos se han agotado prácticamente en todo el archipiélago. Es más asegura que esta ola de calor por estas fechas "nos ha cogido con el pie cambiado". Es más, recuerda que "está entrando la campaña de calefacción, para que te hagas una idea, como radiadores o productos para calentar la casa, que son los productos que se deberían vender en estas fechas". Tampoco hay este tipo de artículos ni en stocks ni en fábrica ya que los proveedores no lo contemplaban para estas fechas de otoño.

"Todo lo que tenemos lo vendemos. De hecho, se nos da la circunstancia de que los ventiladores antes de llegar ya están vendido", asegura Pedro Miguel Marrero de Almacenes Drágica, en Tenerife.

Santiago Moreno

Vinculado desde 2000 a la Cadena SER, fue nombrado...