Nuevo revés para los ganaderos canarios: la ley de bienestar animal de la UE "nos abocará a la desaparición"

Las Palmas de Gran Canaria

Los ganaderos canarios advierten que la revisión que en estos momentos está abordando la Ley de Bienestar de la Unión Europea conllevará que el precio de la carne se triplique a lo largo de los próximos meses. Los sectores cunícola, avícola y porcino expresan su preocupación con una normativa que les obliga a reducir la densidad de población de los animales en casi un 30%. En Canarias, el sector es contundente a la hora de afirmar que estas medidas conllevarán la desaparición de un sector "ya castigado en las islas por el alza de los precios y el elevado coste del mantenimiento de las granjas y explotaciones ganaderas". Los efectos de la aplicación de esta ley serían también inmediatos en el bolsillo del consumidor, ya que por ejemplo en la avicultura de carne, la capacidad de crianza de pollos se reduciría un 50%, por lo que esa bajada de producción repercutirá inmediatamente en un aumento de precio desorbitado para el consumidor. Los expertos aseguran que de los 3,75 euros kilo de pollo entero actual pasaría de golpe a costar cerca de los 10 euros el kilo. Nicolás Pérez, portavoz de la Cooperativa de Ganaderos de Gran Canaria ha explicado a la Cadena Ser que "al haber menos animales, habrá menos cantidad de carne en el mercado. Se subirán los precios, tendremos que importar más. Estamos avocados en Canarias a vivir y depender, exclusivamente, de la importación. Hoy por hoy, no producimos ni el 8% de lo que consumimos y, entonces, ¿ qué estamos haciendo?, pues importando de todo. En vez de crecer cada día, lo que hacemos es disminuir nuestra producción".

Para Pérez, con la modificación de esta ley, pocos serán los ganaderos que podrán adaptarse a la modificación de la misma, ya que no dispondrán de recursos para afrontar la ampliación de sus granjas "hablamos de eliminar extensiones, cantidades de animales que pueden haber en una granja, con lo cual hasta ahora mismo estaban cubicadas en función de la cantidad de animales que teníamos. Lo que tienen que hacer es que cedan en la extensión de la granja y, seguir manteniendo el mismo porcentaje, eso supone también una inversión para el ganadero, no puede comprar una serie de terrenos para ensanchar su granja, hay que buscar soluciones que no perjudiquen al sector, ya que de por si bastante afectados hemos estado por estos últimos años de incertidumbre política y del alza de los precios", ha indicado el portavoz de los ganaderos grancanarios.

Asimismo, lamenta la inacción del Gobierno de España al anuncio realizado desde la Unión Europea de endurecer esta ley "el Gobierno de España no apuesta por el sector primario, si nos vamos a Francia o a otros países europeos, se apoya al sector primario antes que nada. Nosotros en Canarias tenemos la extensión que tenemos, no tenemos las mismas que las granjas de la península ibérica, estamos hablando de granjas de 80 a 90 vacas con la extensión que tienen tan pequeñitas que en su momento cumplían con la normativa y, ahora, pues no la van a cumplir con la modificación de la ley porque tenemos que reducir las cabezas de ganado y, si reducimos las cabezas de ganado, desaparecemos, porque si ahora mismo no son productivas, imagínese con esa situación. Aquí el problema será mucho más grave y tenemos que buscar una solución alternativa, estamos de acuerdo con la Ley de Bienestar Animal pero habrá otras maneras de hacer las cosas. La consejería de Agricultura y Ganadería del Gobierno deberá tomar medidas referentes a este tema". Asimismo, Pérez ha apuntado que "un ejemplo de lo mal que está el sector en las islas, es el bajo nivel de ejecución del Régimen Especial de Abastecimiento, REA, que hasta año unos años se ejecutaba al 100% y que a octubre de este año solo está al 70% de consumo y eso es porque la cabaña ganadera en Canarias está disminuyendo a pasos agigantados".

La cooperativa insular de ganaderos, ha solicitado al ejecutivo regional que medie ante el gobierno central para activar medidas que frenen el impacto de la modificación de la ley y con ello se combata la disminución de las explotaciones ganaderas en Canarias.