"Había hasta 20 niños viviendo en el edificio": La concejala de Servicios Sociales de Arona sospecha que algún menor durmió en la calle tras el desalojo

Santa Cruz de Tenerife

El desahucio de las 90 familias que vivían en el Edificio Chasna, en Costa del Silencio (Arona), transcurrió como se esperaba. Los vecinos, que habían anunciado los días previos que se ejecutaría de forma pacífica, no opusieron resistencia al Grupo de Respuesta y Seguridad de la Guardia Civil que formaban parte del dispositivo para el desalojo, dictado por el Juzgado de Instrucción nº 3 de Arona por "riesgo de derrumbe". En cuanto a la primera noche sin acceso al inmueble, se cumplió lo planteado en un inicio: algunos de los vecinos, sin alternativas habitacionales por parte del ayuntamiento, han dormido en la calle y en la playa.

Durante toda la jornada, los servicios sociales del consistorio han trabajado en las labores de identificación de los vecinos a fin de dar una respuesta individualizada. Apuntan desde la concejalía que aquellos que permanecieron en las inmediaciones de la infraestructura conocían que no había una alternativa para ellos, "Hemos movido cielo y tierra, hemos tocado la puerta de todos los recursos, pero no hay para tantas personas como había ayer", asegura a Radio Club Tenerife, la concejala de Servicios Sociales, Ruth Martín.

La mayoría de los vecinos han encontrado un lugar donde residir temporalmente gracias a allegados y amigos. Mientras, a las personas más vulnerables, entre ellas menores de edad, personas con patologías y mujeres embarazadas, se les ha ofrecido plazas en hostales cercanos o alquileres en apartamentos. Aunque, no todos estos vecinos han aceptado las alternativas planteadas. "Cuando se fue la Guardia Civil y Servicios Sociales, las familias trajeron a los menores, si durmieron algunos menores, que no serían muchos porque estamos hablando con las familias, no podemos confirmarlo", señala Martín.

La concejala no descarta que algunos niños hayan pasado la noche en la calle, pese a las propuestas del Ayuntamiento de Arona. "Unos me dicen que sí tienen un menor, pero ha estado en el cole por la mañana, les echaremos una mano para que no duerma aquí", precisa. Esta cuestión respondería al "miedo" de las familias, que "escondieron" a los niños durante el desalojo. "Es un drama, una situación muy dura sobre todo para las personas, pero también para el equipo desplegado", comenta no sin matizar que una mujer embarazada se "rechazó la alternativa", aunque próximamente será trasladada a un hostal de la zona.

Un bebé de 40 días

Preguntada por el caso particular del bebé de 40 días que permaneció durante toda la mañana bajo una sombrilla y en brazos de su madre, la concejala explica que se trata de una familia de ocho miembros y a la que se ofreció un apartamento en El Médano (Granadilla de Abona). "Había otro menor además del bebé en la misma familia, les buscamos un apartamento, la mamá no quiso ir porque dice que se iba a casa de unos amigos, pero fue la tía con el otro menor de la unidad familiar", explica. Martín ha recibido algunos testimonios en los que se aseguraba que el bebé habría pasado la noche en el mismo lugar del desalojo, a lo que suma que "de ser así sería una gran irresponsabilidad por parte de su mamá".

Uno de los principales problemas a los que se enfrentó el consistorio fue a la identificación de todos los vecinos. De hecho, aún continúan esas labores. nada más conocer el lanzamiento y que 44 viviendas estaban en situación de irregularidad, solicitaron a los vecinos que realizaran un censo. En ese primer momento, únicamente, recibieron datos de una treintena de personas. Número que, al cotejar con el padrón, aumentó hasta las 69. "Había habitantes fantasmas, no sabíamos que estaban aquí, no habían recurrido a Servicios Sociales, y ayer nos encontramos con 200 personas", precisa.

Más menores de los tres que estimaban

En cuanto a la cifra de menores vinculados con este desahucio, Martín comenta que son más de los que pensaban en un primer momento. "Teníamos a dos o tres identificados, ayer había entre 15 y 20, es complicado, pero estamos al pie del cañón, si no nos ayudan no podremos darles respuestas", señala a la Cadena SER. Durante este día, los vecinos irán sacando sus enseres, aún a la espera de una respuesta pública que proponga una alternativa. Aunque desde el ayuntamiento hablan con claridad: no hay viviendas ni para ellos ni para las 800 personas que ya de por sí vivían en las calles de Arona

Estas declaraciones se producen horas antes de que el Cabildo de Tenerife ofreciera, públicamente, "distintas soluciones" para los vecinos de Costa del Silencio. Tanto la presidenta como el vicepresidente insular, Rosa Dávila y Lope Afonso, han brindado su ayuda al municipio para aportar soluciones. Aunque, Martín, aseguraba que "habían tocado en las puertas del Gobierno de Canarias, Cabildo y otros municipios" sin recibir opciones. "No es que no nos quieran ayudar, están saturados, la situación social en Canarias es tremenda, hemos pasado por otras crisis económicas, pero hemos salido airosos, el problema es que no hay viviendas en el mercado residencial y las pocas que hay son carísimas, es un lujo tener una vivienda en el sur de Tenerife y otros municipios del archipiélago", culmina.