"Es un tremendo error": Canarias mira a Barcelona tras la prohibición de las viviendas vacacionales

Canarias

El ayuntamiento de Barcelona ha hecho pública su intención de cerrar los pisos turísticos de la ciudad. Entienden que esta medida permitirá que muchas cases pasen al uso residencial, logrando poner algo más de diez mil viviendas en el mercado de alquiler o a la venta. El alcalde ha dicho que la ciudad no se puede permitir el número de viviendas vacacionales y se ha comprometido a cerrarlas a finales de 2028. Para hacerlo prevén aplicar el decreto-ley de la Generalitat del pasado noviembre que regula las viviendas de uso turístico, una norma que establece un máximo de cinco años para las licencias actuales de los alojamientos turísticos. De esta forma pasa a ser licencias temporales y pasados estos cinco años En las islas, en pleno debate sobre el alquiler vacacional y la regulación que impulsan desde la consejería de turismo, han visto cómo se han ido incrementando las licencias de manera exponencial tras el anuncio de la normal. En todas las islas existen alrededor de sesenta mil licencias según los últimos datos oficiales que maneja la consejería de Turismo.

La vivienda vacacional ha llegado para quedarse, según Turismo

Tan solo en el municipio de Las palmas de Gran Canaria hay disponibles unas 8.000 camas en esta modalidad alojativa en casi 4.000 viviendas vacacionales. Y en concreto, en la zona de Guanarteme, junto a la playa de Las Canteras, se sitúa uno de los puntos más calientes de esta modalidad alojativa. "En esto hay que buscar un equilibro sin demonizar a ningún sector. El alquiler vacacional es un fenómeno que ha venido para quedarse y su respuesta tiene que estar en el planeamiento como el resto de subsectores que ordenan esta actividad: hoteles, casas emblemáticas...", explica la consejera de Turismo del Gobierno de Canarias. "La vivienda vacacional debe tener también una respuesta en el ordenamiento, pero eliminarlas me parece un tremendo error", añade la responsable del área que sin embargo, propone borrar de un plumazo muchas de esas viviendas en la regulación que está preparando el Ejecutivo.

La vivienda compromete el proyecto de vida de la gente

La vivienda es sin duda el principal problema de Canarias, pero también de Barcelona. "Esto es fruto de un trabajo que viene ya de hace tiempo. Barcelona decidió regular todo el uso de alojamientos turísticos hace muchos años", explica Laia Bonet, primera teniente alcalde del ayuntamiento de Barcelona. "Llegamos a la cifra de 10.000 viviendas de uso turístico que estaban pensadas para gente que quería vivir en Barcelona y sin embargo, se dedicaban a acoger visitantes", explica Bonet. "No nos podemos permitir que la vivienda comprometa el proyecto de vida de la gente", añade.

La decisión de prohibir la vivienda vacacional ha sido resultado de un trabajo que Canarias está empezando ahora. "El orden es importante. Lo primero que hicimos fue regular. Cuando tienes una regulación, puedes exigir el cumplimiento de esa regulación", explica la teniente alcalde de la ciudad condal. "Establecimos el tope y los flujos de congestión turística por la incidencia que tienen sobre el mercado de la vivienda y empezamos a perseguir con inspectores y con acuerdos con las plataformas toda la actividad ilegal", añade. En tercer lugar, llegó la prohibición a futuro. Canarias tiene todo ese camino por recorrer.