Miles de personas vuelven a la calle en Canarias para exigir un turismo sostenible, casas asequibles y respeto al medio ambiente

El malestar de los habitantes de la región con mayor desigualdad de España ha vuelto a salir a la calle. Desde «Canarias tiene un límite» critican que después de las manifestaciones del pasado 20 de abril, las instituciones crearon una «mesa de expertos» con objeto, dicen, de «apaciguarles». Por tanto, se movilizan de nuevo ante lo que consideran «pactos vacíos». Miles de canarios han reclamado este domingo más justicia social y mejores políticas de conservación del territorio. Bajo el lema «Canarias tiene un límite» y continuando las reivindicaciones del pasado 20 de abril, los manifestantes han marchado al ritmo de consignas como «Canarias no se vende», «Marichal ponte tú a limpiar» o Coalición Canaria es una inmobiliaria. Reclaman, entre otras cosas un cambio de modelo turístico, modelo que convive con contradicciones como alcanzar récord de visitas y ser al mismo tiempo una de las regiones más pobres de España. Las movilizaciones han tenido lugar, en el caso de Tenerife y Gran Canaria, en Playa de las Américas y Maspalomas, epicentros del sector turístico desde hace décadas por lo que las protestas han tenido lugar rodeados de turistas que miraban con asombro a los manifestantes. También se han hecho notar consignas contra los vertidos al mar que mantienen cerradas varias playas en el Archipiélago, «Tenerifecales, bañate en aguas fecales 365 días al año», es uno de los carteles que podían leerse. Y por supuesto, también ha ocupado un lugar destacado el imposible acceso a la vivienda. Las manifestaciones han tenido lugar en numerosos puntos de las Islas y hasta fuera de ellas; en los núcleos turísticos de Maspalomas (Gran Canaria), Las Américas (Tenerife), Corralejo (Fuerteventura), Puerto del Carmen (Lanzarote), Los Llanos de Aridane (La Palma) y Valverde (El Hierro). También se han convocado protestas en la Plaza de Colón de Barcelona; la Playa del Ayuntamiento de Valencia; la Plaza Nueva de Granada; Ópera en Madrid; e incluso han programado otra protesta en Berlín. En Playa de las Américas, unas 2.000 personas han comenzado la marcha en el Metrópolis Center y en ella las protestas han girado en torno a la falta de toma de decisiones encaminadas a escuchar las reivindicaciones del pasado 20 de abril, principalmente una moratoria turística. Mientras, en Maspalomas, alrededor varios miles de personas se han manifestado y, en declaraciones a los medios, el portavoz de Ben Magec y de la plataforma que organiza las manifestaciones, Eugenio Reyes, ha lamentado que hayan pasado seis meses «y que todo siga igual», con un Gobierno, ha dicho, que tiene intención de seguir aumentando las camas turísticas y los establecimientos hoteleros. «Es lamentable que tras seis meses no haya habido un contacto oficial ni se haya creado un observatorio o algún espacio para la sociedad civil y escuchar a la ciudadanía, que tiene propuestas concretas», ha agregado. Y aunque el modelo turístico no es el único motivo de queja de los manifestantes, el sector ha comenzado a moverse. En la tarde de este domingo, de hecho, se ha convocado una manifestación en Lanzarote en defensa del que es, desde hace décadas, el motor económico del Archipiélago. La patronal de la provincia tinerfeña, ASHOTEL, tomaba esta semana la iniciativa en una reunión con representantes de unas 30 empresas y asociaciones. Su objetivo, impulsar la defensa de la actividad y la mejora continua en el sector. El encuentro contó con la participación de representantes del ámbito sanitario, del transporte, la agricultura y la ganadería, el ocio y la hostelería, entre otros; En la cita se puso sobre la mesa la relevancia que el turismo tiene no solo como motor económico, sino también social para el conjunto de la sociedad canaria.

Miles de personas vuelven a la calle en Canarias para exigir un turismo sostenible, casas asequibles y respeto al medio ambiente

Los colectivos que integran la plataforma Canarias tiene un límite lamentan que hayan pasado seis meses desde la manifestación del 20 de abril "y que todo siga igual"

Maite Álvarez

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