La Guardia Civil elabora un informe sobre la extracción de áridos en La Palma, con El Riachuelo en el punto de mira

Santa Cruz de La Palma

La extracción de áridos situada a las puertas del Parque Nacional de la Caldera de Taburiente está en el foco mediático. Los vecinos de la zona denuncian su impacto ambiental y las molestias que genera, mientras que los propietarios de Áridos El Riachuelo S.L. defienden su derecho a explotar económicamente este entorno privilegiado. Todo ocurre tras la ampliación de la concesión de la actividad minera por parte del Gobierno de Canarias a la empresa Áridos El Riachuelo S.L., lo que ha indignado a buena parte de la sociedad palmera. El actual presidente del Cabildo de La Palma, Sergio Rodríguez, llegó a asegurar que se "amarraría a un pino" si en esta zona se llegaba a instalar una planta de asfalto, cosa que no ha ocurrido por el momento. Sin embargo, estas declaraciones fueron aprovechadas por los vecinos de la zona para escenificarla durante la manifestación celebrada el pasado sábado, usando a un muñeco en el lugar del presidente del Cabildo.

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Hasta el momento, el procedimiento judicial, iniciado a raíz de la denuncia de un vecino, no ha registrado grandes avances, pendiente de un informe del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil. El Ministerio Fiscal está investigando los hechos, en el marco de unas diligencias previas abiertas en el Juzgado de Instrucción de Los Llanos de Aridane. Este informe, encargado en el marco de la investigación, deberá determinar a través de una inspección ocular de los agentes si Áridos El Riachuelo S.L. cumple con todas los requisitos exigidos en la Ley. Las diligencias previas fueron abiertas a partir de la denuncia de uno de los vecinos de la zona y no se trata del único procedimiento judicial abierto.

Un informe demoledor del Cabildo de La Palma

El yacimiento de Cueva Tiznada fue descubierto en 2017. El servicio de Patrimonio Histórico y Arqueológico del Cabildo de La Palma elaboró un informe al que ha tenido acceso la SER, en el que detallan la posible afección que la actividad minera tendría sobre las pinturas rupestres halladas en Cueva Tiznada. El yacimiento fue localizado al fondo de un tubo volcánico de unos ochenta metros. La dificultad para acceder lo ha mantenido intacto hasta la fecha, sin embargo, "los sedimentos arqueológicos y las paredes del tubo están cubiertos de una fina capa de polvo que, seguramente, procede de la planta de extracción de áridos y hormigón situada a escasos metros al sur del yacimiento arqueológico", afirma el el jefe de sección de Patrimonio Histórico y Arqueológico del Cabildo de La Palma, Jorge Pais.

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El informe no plantea duda alguna sobre la autenticidad de las pinturas rupestres, "en la actualidad seguimos investigando sobre el yacimiento, si bien hemos de extremar las precauciones dada la fragilidad del mismo", reza el informe del Cabildo. Pais califica el yacimiento como algo "único en la Arqueología de La Palma y aun del resto del Archipiélago", e insta a tomar medidas para "garantizar la preservación y conservación de este yacimiento", zanja. El documento adjunta un segundo informe sobre la posible afección a la Cueva Tiznada por la planta de extracción de áridos y hormigón El Riachuelo elaborado por la arqueóloga Nuria Álvarez Rodríguez.

En los trabajos prospectivos se documentan varios paneles con pinturas, se localizaron todas en el fondo de la cavidad. "Son trazos irregulares hechos sobre la piedra posiblemente con restos de carbones. De hecho, en el suelo donde se encuentran las pinturas aparecen varios fragmentos de carbones con lo que pudieron haber sido pintados los diferentes motivos", reza el informe de la arqueóloga. "El polvo generado por la machacadora es desplazado por los vientos y contaminaría el yacimiento generando un daño irreparable", dice la arqueóloga Nuria Álvarez en el informe encargado por el Cabildo de La Palma.

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El citado informe llega a calificar como "crítico" el impacto de la actividad minera en la zona. "Consideramos que el impacto es crítico al correr un alto riesgo la conservación de las pinturas. Es por ello que se recomienda no continuar con la extracción de áridos y hormigón para así preservar un bien único como es la Cueva Tiznada", concluye el informe arqueológico avalado por los expertos.

Una actividad con licencia desde 1995

El negocio propiedad del conocido empresario Tomás Barreto cuenta con licencia desde el año 1995. A lo largo de los años, ha recibido numerosas prórrogas, incorporando al procedimiento un Plan de Restauración del daño ya producido. El Gobierno de Canarias autorizó la prórroga de la autorización de explotación, "sin prejuicio a terceros, dejando a salvo el derecho de propiedad y no excluye la necesidad de obtener las demás autorizaciones", reza la resolución. La autorización administrativa se concede por un plazo de diecisiete años para la extracción de 1.193.931 metros cuadrados de reservas con una producción anual de 70.000 metros cuadrados.