La alcaldesa de Arona y los vecinos reclaman el decrecimiento de la actividad del Puerto de Los Cristianos

El Gobierno de España ha dado luz verde a un plan para mitigar la saturación marítima y viaria a la que se sometido el Puerto de Los Cristianos. Una infraestructura clave para la conectividad entre Tenerife y las islas verdes por la que pasaron 2,3 millones de pasajeros en el año 2024. La reforma, según la respuesta por escrito que ha facilitado el Ministerio de Transportes a la Agrupación Socialista Gomera, pasa por la construcción de una nueva terminal de pasajeros, la creación de más aparcamientos y soterrar el acceso.

Igualmente, se tramita una nueva Delimitación de Espacios y Usos Portuarios para incorporar 416 metros cuadrados en el extremo norte del muelle para mejorar el acceso y el control del aparcamiento. Además, la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife prevé adjudicar en breve los trabajos finales de refuerzo del dique. Las distintas reformas que se proyectan sobre Los Cristianos han suscitado distintas reacciones. El Ayuntamiento de Arona y los vecinos de la zona parecen mantener una postura unánime: reordenar, sí; ampliar y alterar aún más la bahía, bajo ningún concepto.

Rechazo rotundo a la ampliación

La alcaldesa Fátima Lemes ha lanzado un contundente mensaje: el Puerto de Los Cristianos no puede más. "Yo confío en que sea una mejora de aparcamientos, del entorno, de la terminal y del disfrute de las personas, también de los pescadores". La dirigente habla abiertamente además de la necesidad de decrecer en estas instalaciones: "A nosotros nos gustaría que la noticia fuera que hay una reordenación para disminuir el tráfico y que el tráfico de mercancías se va a desviar o que las frecuencias se van a reducir a la mitad o más". No obstante, señala que para ello serían necesarias otras actuaciones que pasarían "no sé si por el Puerto de Granadilla o por retomar el Puerto de Fonsalía".

En la misma línea se muestra la Plataforma contra la ampliación del Muelle de Los Cristianos. Su presidente Jorge Bello explica que "hoy por hoy existe un caos tremendo motivado por el tráfico portuario". Denuncia que esta situación afecta directamente a los negocios y la calidad de vida: "El futuro del municipio de Arona está en entredicho porque vivimos del turismo y las playas son fundamentales. Si perdemos nuestras playas, perdemos el turismo".

El compromiso de la Autoridad Portuaria

El portavoz incide en que no existe un problema con el volumen de los pasajeros sino con las mercancías y el acceso a la infraestructura "por medio del pueblo". Así, plantea que "si las mercancías se pudieran sacar, sobraría puerto (...) Evidentemente hay infraestructuras que están creadas, como el Puerto de Granadilla o el Puerto de Santa Cruz, desde las que se puede hacer la operativa".

Por su parte, la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, de quien va a depender buena parte de lo que ocurra en Los Cristianos, ha asegurado que la reforma no incluye, en ningún caso, una ampliación. Su responsable, Pedro Suárez, ha detallado en Radio Club Tenerife en qué consistirán las obras: "Tirar la estación marítima, con lo cual ya ganamos una superficie importante. Trasladar la estación marítima hacia el parking, hacer un pequeño edificio que albergue oficinas y la propia estación marítima, ganar hasta tres plantas de aparcamiento y soterrar la entrada".

Las obras comenzarán, previsiblemente en 2026 y durarán entre seis y ocho meses. Sobre la necesidad de decrecer que han planteado los vecinos y la alcaldesa, Suárez ha señalado que pronto se notará un desahogo en el Puerto del sur de la isla dado que Fred Olsen pondrá en marcha una nueva ruta de carga entre La Palma y Santa Cruz de Tenerife: "Hasta ahora entraba por Los Cristianos. Va a ser un enorme alivio".