Tráfico estudia instalar un radar de tramo en la A-8, en la zona de Saltacaballos
El radar contempla medir un tramo de 6 km desde el viaducto de Ontón
Entrevista a José Miguel Tolosa, jefe Provincial de Tráfico
04:16
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1687961551346/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Santander
El accidente que se ha registrado, en Castro Urdiales, ha reabierto el debate sobre cómo evitar los accidentes, en el tramo de carretera más crítico de Cantabria. El último accidente se ha cobrado la vida de un transportista asturiano. El camión, se precipitó por el viaducto de Ontón pero, de momento, se desconocen los motivos del siniestro, que la Guardia Civil está investigando.
Se han instalado radares en la zona del Saltacaballo, se ha limitado la velocidad a 80 km por hora en varios tramos y se han hecho mejoras en la calzada para tratar de reducir el número de accidentes. "Se ha modificado el comportamiento y la siniestralidad en la zona ha ido bajando de forma significativa. El número de siniestros se ha reducido a la mitad, desde entonces y también la gravedad de esos accidentes", ha explicado, en Hora 14 Cantabria, José Miguel Tolosa, jefe Provincial de Tráfico.
Sin embargo, el número de infracciones entre los conductores que circulan a más velocidad de la permitida se ha duplicado. El radar que hay instalado, en la bajada hacia Santander, ha captado a más de 28.000 vehículos circulando a más de 80 km/h.
Los radares convencionales de Saltacaballos se instalaron en 2016. "La gente, en general, los respeta pero hemos visto un incremento en las denuncias. Un radar convencional se conoce y cuando la gente llega a la altura del radar reduce la velocidad y vuelve a acelerar cuando lo pasa. Estamos estudiando sustituirlo por un radar de tramo", ha avanzado Tolosa.
Radares de tramo
Los radares de tramo pueden tener varios kilómetros de longitud. Se trata de un sistema de cámaras que graban de forma continua, se identifica la matrícula de cada vehículo a la entrada y a la salida del tramo. Un ordenador relaciona las matrículas iguales, comprueba los tiempos de paso y calcula la velocidad media del vehículo.
Cuando la velocidad media del recorrido está por debajo del límite, no hay infracción. Pero si la velocidad media del trayecto supera el límite, se tramita la denuncia de la infracción.
"Se controla para que sea una velocidad homogénea a lo largo de los 6 o 7 km que consideramos más críticos en la zona. En la zona del viaducto de Ontón, donde se ha producido el último accidente que tiene un trazado peligroso, con muchas curvas que ronda los 30 años de antigüedad", ha indicado.
El jefe Provincial de Tráfico ha avanzado que se está ultimando el estudio para las instalación de un radar de tramo que sustituya al actual, en la zona.