'Mimo', la nueva novela del cántabro Héctor Peña Manterola
Es la segunda ambientada en Cantabria tras la publicación de 'Cabárceno'
Héctor Peña Manterola nos presenta 'Mimo', su segunda novela
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Santander
En Hoy por Hoy Cantabria, el autor cántabro Héctor Peña Manterola nos ha presentado su segunda novela, 'Mimo', que fusiona la novela negra y el terror. La historia La novela comienza en 1996, con un niño que se separada de sus padres durante las fiestas de Nuestra Señora de El Carmen, en Camargo. El chiquillo se pierde y comienza a llover, y encuentra cobijo en la tienda de una gitana vieja que augura ver el futuro en una bola de cristal.
A partir de ahí, la narración salta a 2023, y se desarrolla por distintos puntos de Cantabria, combinando los capítulos convencionales con recortes de prensa, grabaciones de voz, informes policiacos y psicológicos, microrrelatos, cuentos y versículos bíblicos.
Carlos, músico callejero, debe regresar de Madrid a Cantabria tras enterarse del doble fallecimiento de sus padres en un accidente automovilístico. Allí se hará cargo de su hermana Elena, una adolescente que guarda un trauma infantil: una sombra con ojos amarillos que se ponía encima de ella y le hacía daño.
A su vez, Tomás García Sanjurjo, heredero de una de las familias más ricas e influyentes de la comunidad, es asesinado durante el Carnaval de Santoña. Las cámaras graban una sombra humanoide con enormes ojos amarillos en las inmediaciones de una conservera y la policía la señala como presunta asesina.
Un mes después, Amanda Sainz, la mujer de Francisco Miró, sufre un destino similar: su marido la encuentra en un cobertizo de Morero devorada viva. El ADN del asesino no encaja con los de los registros de la Guardia Civil.
Los asesinatos se siguen sucediendo hasta alcanzar el nivel de atentados terroristas. Los familiares de las víctimas emprenden su propia cruzada contra el culpable, aunque nadie sabe quién o qué es. En ese momento, Gerardo Arias, profesor de Matemáticas al que le restan unos meses para jubilarse, encuentra un patrón perturbador: los crímenes son idénticos a los cometidos en las novelas de terror de un famoso autor escudado bajo un seudónimo, y el estilo le recuerda al de un antiguo alumno suyo que participaba en los concursos de relatos del instituto. Un alumno fallecido hace siete años.
