Torrelavega rinde homenaje a los bailarines que forman parte de la historia de la danza en la ciudad
Un libro escrito por Orlando Peláez repasa la trayectoria de todos ellos y recuerda a los pioneros Rosario Petri, Peter Smink y Eduardo Akamine
Orlando Peláez, autor del libro sobre la historia del ballet de Torrelavega
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Torrelavega
En el último medio siglo Torrelavega ha sido cuna de grandes bailarines. Un camino que abrió Rosario Petri, allá por los años 70, en cuya escuela se formaron profesionales que todavía siguen en activo como Ana Cabo, María y Ana Eulate.
Después llegaron Peter Smink y Eduardo Akamine, que en los años 80 fundaron el primer ballet de Torrelavega integrado por Orlando Peláez, Lidia Sanz, María Gutiérrez, Marcos Marco, Esdras Hernández y Javier Castillo Poty.
Peter y Eduardo situaron a la escuela de Torrelavega como un referente a nivel nacional, formando a numerosos bailarines que luego han tenido una gran proyección y reconocimiento profesional.
Libro sobre la historia del ballet
Este fin de semana, el Teatro Concha Espina ha acogido una gala-homenaje que ha servido para recordar a quienes escribieron las primeras páginas de la historia del ballet de Torrelavega y a quienes luego siguieron sus pasos.
El promotor de la gala, Orlando Peláez, ha escrito también un libro que recoge la historia de la danza en la ciudad, así como la trayectoria de sus principales protagonistas.
En A Vivir Cantabria recordamos con Orlando cómo Torrelavega ha sido cantera de excelentes bailarines que luego han formado parte de grandes compañías profesionales.
Joven promesa
La semilla que plantaron Charo Petri, Peter Smink y Eduardo Akamine ha tenido continuidad en jóvenes como Joaquín Ruiz, bailarín torrelaveguense de 20 años de edad, que actualmente trabaja en Nueva York.
A pesar de su juventud, Joaquín reconoce la huella que han dejado los pioneros del ballet en la ciudad y destaca también la importancia de tener "referentes masculinos" en el mundo de la danza, como en su día fueron Orlando y Poty.