Así es el 'palacete de Cruz Roja', único en su estilo de los que se conservan en Ciudad Real

Ciudad Real

Tras el anunciar Emiliano García-Page en el debate del estado de la región la inversión de 2,7 millones de euros para rehabilitar el antiguo palacete de la Cruz Roja de Ciudad Real para poner en marcha una oficina de atención a víctimas de agresiones sexuales, poco a poco se conocen más detalles de este proyecto.

De hecho, la delegada de la Consejería de Igualdad en la provincia, Manoli Nieto, ha explicado que se trata de un servicio en el que llevan ya tiempo trabajando, tendrá un equipo de atención las 24 horas del día y además contará con dependencias habitacionales para situaciones de emergencia.

Se trata de un pequeño palacete ubicado en la ronda Ciruela de la capital, que según ha destacado el micrófonos de la SER el prestigioso arquitecto Diego Peris, cumpliría con los requisitos específicos que necesita este servicio. Además, ha incidido, permitirá la recuperación de uno de los edificios más emblemáticos de Ciudad Real.

Construido entre los años 20 y 30 del pasado como vivienda residencial en el límite de la ciudad, con vistas al campo. Y aunque en su época se construyeron más, como el palacete de los Barrengoa o de los Messía de la Cerda, en la actualidad es el único en su estilo de los que se conservan en la capital, como refleja en un pormenorizado informe realizado por Diego Peris a petición del Colegio de Arquitectos de Castilla-La Mancha.

A la hora de hablar de patrimonio histórico, recalca Peris, no sólo hay que tener en cuenta el valor arquitectónico, también de su su singularidad y lo que ha supuesto para el entorno en el que se ubica. Cuestiones que asegura cumple.

Se trata de una vivienda con toques modernistas impulsada por el farmacéutico Conrado López. Su familia fue propietaria del inmueble hasta mediados del siglo pasado, como nos ha contado su nieto, el escultor ciudadrealeño Kirico.

Un proyecto de Telmo Sánchez, arquitecto provincial que también llevó a cabo otros edificios importantes de la provincia como el ayuntamiento y el Gran Teatro de Manzanares o la casa consistorial de Malagón. También fue el que diseñó las cubiertas de los patios del Palacio de la Diputación o del Casino de Ciudad Real.

Fue utilizada como academia de estudios hasta que en 1972 lo adquiere Cruz Roja Española que lo utiliza como sede en Ciudad Real hasta que en 2006 fue vendido a la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha que los salvó del derribo, unos trabajos que ya habían comenzado.