Cruz Roja reduce la factura energética en los hogares más vulnerables de Cuenca

Cuenca

Hay familias de la provincia de Cuenca con bajos ingresos que tienen que elegir entre comer o encender la calefacción y esta es una cifra que va en aumento debido al contexto de crisis actual. Una realidad que no es ajena para los profesionales y las personas voluntarias que desarrollan Moviéndonos por el Ahorro Doméstico, un programa de Cruz Roja Cuenca que lleva a cabo el Área de Medio Ambiente y que persigue un doble objetivo reducir la factura energética de los hogares más vulnerables y fomentar un consumo eficiente, en línea con el compromiso que tiene la organización humanitaria con promover un comportamiento sostenible y de cuidado del medio ambiente. Hemos abordado este tema en Hoy por Hoy Cuenca con la responsable del área de Medio Ambiente de Cruz Roja en Cuenca, Noemí Nielfa, y con una usuaria del programa, Khaoula El Achhhab.

“En la mayor parte de los casos”, relata Nielfa, “detectamos a las familias y personas porque tienen problemas para poder pagar la factura de la luz o porque viven en un piso de alquiler con radiadores eléctricos que no pueden encender. Llegan a Cruz Roja principalmente, por esas razones y es ahí donde se empieza a trabajar con ellas”.

Existe un procedimiento por el que hay un primer contacto telefónico, “después, con la herramienta virtual Enerson se analiza la situación socioeconómica del hogar para detectar las necesidades y reunir una serie de datos, también de la vivienda”, apunta Nielfa. “Con todas esas pistas, el siguiente paso es convocar un taller sobre ahorro energético donde los usuarios acuden con sus facturas, para enseñarles a ahorrar y entregarles un kit energético”.

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Khaoula

Khaoula es una madre monomarental de origen magrebí que vive en Cuenca con una menor a la que le era imposible calentar su vivienda dotada con radiadores eléctricos. Tras acudir a Cruz Roja, la organización le ha facilitado una estufa de gas y le ha solicitado el bono social. “Hemos conseguido reducir la factura de la luz un 80% y ahora ya tengo la casa caldeada”, nos ha contado, y su hija puede jugar o hacer los deberes con normalidad.

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46 familias

A través de esta iniciativa, esta organización humanitaria ayudó el año pasado a 46 familias (personas mayores o en situación de extrema vulnerabilidad) con severos problemas para asumir el coste de su factura energética y/o cuyas condiciones de habitabilidad de la vivienda no garantizaban unos mínimos de confort energético. De esta forma, consiguieron contribuir a mejorar el consumo y la eficiencia energética de casi medio centenar de hogares conquenses en diez localidades de la provincia: Cuenca, Mota del Cuervo, Alcantud, Tarancón, Horcajo de Santiago, Fuente de Pedro Naharro, Casas de Fernando Alonso, El Provencio, San Clemente y Las Pedroñeras.

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“Esta ayuda se hace imprescindible cada vez para más familias”, explica Nielfa, que remarca que “por una cuestión económica y medioambiental, todos debemos ser conscientes de que tenemos que ser más eficientes y responsables a la hora de utilizar todo lo que tenemos en casa, independientemente de que podamos pagarlo o no. De ahí que este movimiento por el ahorro doméstico de Cruz Roja se centre tanto en dotar de herramientas para el ahorro energético, y ayudar a reducir el consumo de luz, agua y gas ante situaciones de pobreza energética, como también en el fomento de conductas respetuosas con el entorno a través de una gestión sostenible en el hogar”.