Dolores de Lara, la fotoperiodista manchega
En Postales Manchegas recordamos a la fotógrafa de La Solana tristemente fallecida en accidente de tráfico junto a su marido, también fotógrafo
'Postales Manchegas', con Mireia Morollón: Dolores de Lara
12:41
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1687349163278/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Ciudad Real
Dolores de Lara Díaz-Mayordomo nació en 1952 en La Solana. Desarrolló una extensa carrera publicando en conocidas revistas como ¡Hola! o Semana, colaboró también con periódicos de la provincia como Canfali Valdepeñas o Diario Lara, entre otros medios de comunicación, y llegó a crear la web LaMontera.net especializada en el mundo del toro, y también en este ámbito dejó fotos para el recuerdo.
Aunque afincada en Madrid no dejó de visitar su pueblo natal y de hecho fue de regreso a Madrid, cuando sufrió un brutal accidente en la A-43, que le costó la vida a ella y su marido, el también fotógrafo, Juan Campos. Tenían 65 y 63 años.
"En España, la incoporación de las mujeres a las redacciones de los periódicos se produjo fundamentalmente entre los años 66 y 86. Es cuando llegó el aluvión, aunque antes ya las había", recuerda Isidro Sanchez, que junto con Esther Almarcha, colaborador honorífico y directora del Centro de Estudios de Castilla-La Mancha, han recordado esta semana la figura de Dolores de Lara, para la que pedían un mayor reconocimiento en Castilla-La Mancha, puesto que llegó a ser una referencia.
En este sentido, recordaban la promoción y difusión que en Barcelona se ha hecho de Joana Biarnés, considerada, hasta el momento, como la primera fotoperiodista, de la que se han promovido exposiciones, libros y reconocimientos.
La directora del Centro de Estudios de la UCLM valoraba, no obstante, que en las últimas década, gracias a la labor realizada por investigadores de la Historia de la Fotografía se esté rescatando a mujeres desde los inicios de fotografía, que la historiografía no se había ocupado de ellas, muchas, camufladas tras el nombre de su marido.
