Castilla-La Mancha se prepara para acoger a 200 inmigrantes llegados a Canarias: "Al margen de ideologías, hay que tender la mano. Son personas"

Toledo

Ante las cifras sin precedentes como las que deja el mes de octubre en la ruta migratoria canaria, en la que han arribado en cayucos más de 13.000 personas, el Gobierno de España ha acelerado el traslado a la península de los inmigrantes para descongestionar los centros de primera acogida en el archipiélago canario. En Castilla-La Mancha, el centro de refugiados de Accem en Sigüenza (Guadalajara) lleva décadas acogiendo a aquellos que intentan empezar a construir su futuro desde cero.

Actualmente, en Castilla-La Mancha, se cuentan con unas 200 plazas -150 en Guadalajara y 50 en Cuenca-. Aunque se están viendo más posibilidades como conventos, edificios de ordenes religiosas u otros lugares que estén cerrados o en desuso y que se puedan utilizar para "esta realidad urgente". Así lo ha descrito el responsable de Accem en la región, Braulio Carlés, en 'La Ventana de Castilla-La Mancha'.

Ya hay un grupo de inmigrantes en Guadalajara de unas 48 personas, y otros grupos más reducidos en Albacete y en Toledo. Todo apunta a que, de aquí al fin de semana, esas 200 plazas estén ocupadas. La mayoría, por hombres jóvenes de entre 18 y 40 años, aunque también hay mujeres con menores.

"Ante una realidad de tanto sufrimiento, intentan llegar a lugares seguros" y, por eso, como se tiene que responder desde este lado privilegiado del mundo, según Carles "es echando el resto". La ayuda que aquí se les puede dar pasa, en primer lugar, por el acogimiento más básico -cama y comida- y después, por ubicarles.

"Las llegadas son duras" y las cifras no reflejan la realidad tal y como es. Para Carles, es esencial "tenderles la mano con humanidad". En muchas ocasiones, ha contado, los inmigrantes llegan desconfiando y hay que tranquilizarles, "tienen que ver que este es un lugar de humanización".

Estos traslados han generado malestar en ayuntamientos y comunidades gobernadas mayoritariamente por el Partido Popular, que acusan al Ejecutivo de falta de coordinación y de no informales con suficiente antelación de las derivaciones. Preguntado por este asunto, Carlés ha recalcado que la labor de Accem es "la de acogida" pero, ha insistido, "cuando hablamos de personas que sufren y mueren, hay que estar por encima de las ideologías". "Estamos en un Estado de derecho" y todas las administraciones, "al margen de ideologías", tienen que poner a disposición todos los recursos posibles.