Historia, naturaleza, morteruelo y pinturas rupestres en Villar del Humo
Un recorrido por los encantos naturales y tradicionales de esta localidad de la Serranía Baja de Cuenca
Historia, naturaleza, morteruelo y pinturas rupestres en Villar del Humo
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Cuenca
Hace más de 5.000 años los hombres y mujeres del Paleolítico decoraban sus refugios con figuras que representaban escenas cotidianas de su quehacer diario. Muchas de ellas representaban actividades como la caza o eran iconos de la fertilidad. Figuras estilizadas de trazos finos generalmente en negro o tonos ocres y pintadas en abrigos al aire libre. Lo que se conserva de aquel arte puede ser visitado en algunos parajes de la Serranía de Cuenca. Le invitamos a descubrir la historia, la naturaleza, las calles, las fiestas, el morteruelo y las pinturas rupestres de Villar del Humo.
Patrimonio de la Humanidad
En diciembre de 1998 la UNESCO declaró Patrimonio de la Humanidad las pinturas rupestres del arco mediterráneo entre las que se incluyen los abrigos y cuevas de Villar del Humo, en la Serranía Baja de Cuenca. Desde entonces ente municipio trabaja, no sólo por su conservación sino por su difusión y aprovechamiento como reclamo turístico.
Visita al pueblo
A Villar del Humo se llega desde Cuenca por la carretera de Teruel. En Carboneras de Guadazaón nos desviamos dirección Cardenete para llegar enseguida a nuestro destino, un pueblo enclavado entre la vegetación del monte. El entorno paisajístico no defrauda a nadie, es de una belleza incalculable formado por monte bajo y pinares de rodenos y pino carrasco.
Hubo un tiempo en el que a este pueblo se le llamó Villar de Lobos, pero también se ha llamado ‘de los ladrones’ y ‘del oro’, antes de adoptar el topónimo actual.
Restos históricos
Lo más conocido de este pueblo son sus pinturas rupestres, pero pocos saben que en su término municipal se encuentran también restos de otras civilizaciones.
Hay restos de tres culturas anteriores, prehistóricos, íberos y romanos. De la época de los íberos se conservan algunas inscripciones en roca; de los romanos también quedan piedras marcadas y en el Museo de Cuenca se conservan más de mil monedas de ese periodo histórico encontradas en el paraje ‘Peña el Castellar’.
Siglos más tarde, los árabes también dejaron huellas de su estancia en estas tierras escarpadas de la Serranía de Cuenca. En su día se han encontrado cerca del pueblo unas tumbas de esta civilización. Se encuentran en un lugar llamado ‘El Cagigar’, están orientadas a La Meca y pueden ser visitadas si se desea.
Pinturas rupestres
Pero de entre todos los restos históricos, los de mayor importancia son las pinturas rupestres. Son muchos los abrigos de este tipo que se han encontrado a lo largo y ancho de la costa mediterránea y la UNESCO decidió apostar por su conservación con la de declaración de Patrimonio de la Humanidad en 1998. En total se contemplan hasta 950 abrigos de varios países, ente ellos el ubicado en el paraje de ‘Selva Pascuala’ de Villar del Humo, en torno al cual se ha creado un parque cultural.
Los primeros descubrimientos se remontan a principios del siglo XX, a 1917, cuando se encontraron en la llamada ‘Peña del Escrito’ las primeras pinturas. Años después, en 1968, un grupo de alumnos de la escuela local, acompañados de su maestro, descubrió más pinturas en la zona del ‘Castellón de los Machos’. Los últimos hallazgos datan de 1979 localizados en la ‘Peña del Castellar’.
Más recientemente, la Universidad de Castilla-La Mancha realizó estudios que sacaron a la luz nuevas pinturas. En total, 12 abrigos con más de 200 figuras esquemáticas en las que se representan bóvidos, cérvidos, cápridos y otras escenas.
Pinturas que guardan secretos de culturas y gentes que vivieron aquí hace miles de años. Los historiadores sitúan estas pinturas entre el Paleolítico y el Neolítico. Estamos hablando de hace entre 5.000 y 8.000 años.
Las pinturas se encuentran en los montes cercanos al pueblo y la visita puede ser guiada por los monitores de las empresas que ofrecen recorridos en vehículos todo terreno, imprescindibles para llegar hasta los abrigos.
Fiesta de quintos
De vuelta al pueblo le recomendamos un paseo por sus calles o una charla con sus vecinos. A lo mejor alguno de ellos acaba hablándole de la fiesta de quintos en Semana Santa. Los jóvenes de 18 años se encargan esos días de custodiar los santos, de sacarlos en andas, de organizar los distintos actos que se realizan esa semana. Por ejemplo, la noche del Domingo de Resurrección se visten los ‘judas’, se cuelgan de los balcones y se apalean al amanecer.
Canto del mayo
Otra de las tradiciones que aun se conserva es la de ‘cantar los mayos’. Hay dos canciones que se cantan todos los años, el ‘mayo de la Cruz’ y el ‘mayo de la Virgen’, uno de los solteros y otro de los casados. Primero canta todo el pueblo el mayo de la Virgen; a continuación se ‘subasta al mayo’ y el que puje más alto decide a quién se le vuelve a cantar el mayo. De la misma forma se procede con el mayo de la Cruz.
Morteruelo
Una última recomendación para la visita a Villar del Humo. No se vayan del pueblo sin probar el morteruelo que se elabora aquí, aseguran que es el mejor del mundo.
Paco Auñón
Director y presentador del programa Hoy por Hoy Cuenca. Periodista y locutor conquense que ha desarrollado...