En busca de una moneda en las cloacas de las termas romanas de Noheda
La campaña de excavaciones de este verano en el yacimiento conquense se centra en el subsuelo del ‘balneum’ y en el edificio cuadrangular
En busca de una moneda en las cloacas de las termas romanas de Noheda
Cuenca
El yacimiento romano de Noheda, en el municipio conquense de Villar de Domingo García, es conocido mundialmente por sus mosaicos figurativos localizados en el triclinium de una villa romana del siglo IV d C. Desde 2019 se puede visitar reservando en la web de Cultura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Bajo el ‘balneum’
Cada verano se suceden las campañas de excavaciones en este espacio que no deja de sorprender a los arqueólogos. Tras el mosaico se pasó a descubrir el balneum, las termas privadas de este complejo señorial de hasta 900 metros cuadrados. Sorprende pasear entre las distintas estancias, salas y piscinas de aguas calientes, templadas o frías. Y bajo esos lujos: los desagües, galerías de evacuación de las aguas, perfectamente conservadas, de un metro de altura por 60 centímetros de ancho. Así hasta cien metros de canalizaciones subterráneas.
Por ahí pasaba el agua de las piscinas y evacuaba con ella pequeños objetos como teselas de los lujosos mosaicos que también decoraban estas estancias. “Hemos encontrado opus sectile, un material que se utilizaba para decorar las paredes de las termas romanas, y algunas teselas de colores de los mosaicos del suelo”, explica Marina, una de las estudiantes universitarias que participa este verano en la excavación de Noheda. Esta labor la comparte con Alexia. Las dos criban kilos y kilos de tierra “prestando especial atención a los materiales que podemos sacar y clasificar, todo documentado por estratos”, explica.
En busca de una moneda
“El objetivo de la excavación metódica de la canalización es localizar todos los objetos que hay, que se les cayeron”, explica Miguel Ángel Valero, el arqueólogo que dirige los trabajos y profesor en la Facultad de Humanidades de la Universidad de Castilla-La Mancha en Cuenca. “Ojalá la diosa Fortuna esté con nosotros y encontremos una moneda o una pieza de cerámica que nos permita saber ese momento final del balneum para conocer como termino la fase álgida del yacimiento”.
Entre las galerías
Para que esa tierra llegue a manos de Aitana y Marina, antes hay que extraerla de esas galerías. Son fangos acumulados que sacan a la superficie otros universitarios que participan en la excavación gracias al convenio de la UCLM con otras universidades. Fermín estudia el tercer curso del Grado de Historia en la Universidad de Navarra además de un Diploma en Arqueología y le encontramos en el único agujereo que permite el acceso a ese entramado subterráneo. Dentro de las galerías hay dos compañeros de beca.
“Estoy recogiendo los cubos en los que mis compañeros sacan la tierra de la sedimentación”, explica Fermín que quedó fascinado por este yacimiento conquense tras una charla del propio Valero en su facultad. “No dudé en solicitar las prácticas. No es cómodo estar aquí abajo, pero sí es interesante para nosotros por el buen estado de conservación que tiene. Vamos a ver qué encontramos”.
A la espera de que aparezca algún pequeño objeto que aporte algo de luz a la oscuridad del túnel en el que aún se esconde el dato que más buscan los arqueólogos desde que empezaron a descubrir este yacimiento: quién fue el propietario de tan lujosa villa.
Alumnos de Secundaria
Más allá de este frente de investigación, la excavación en Noheda se centra también este verano en el gran espacio cuadrangular ubicado entre el triclinium y el balneum. Ese espacio está cubierto con una carpa y en su interior encontramos a un grupo de dieciséis alumnos de Secundaria, la mayoría del IES Hervás y Panduro de Cuenca capital.
Es la primera vez que alumnos tan jóvenes participan en esta excavación. Valero explica que el objetivo es “despertar en ellos el interés por la arqueología”. En concreto, sus labores consisten de quitar tierra y piedras pequeñas con delicadeza de unas tumbas que han aparecido. De momento se ven varios cráneos, algunos de niños.
“Se datan en el siglo V d C y pertenecerían a las personas que ocuparon esta villa romana tras el colapso del edificio y que vivieron aquí durante décadas hasta llegar a usar este sitio como un cementerio”, apunta Valero.
Paco Auñón
Director y presentador del programa Hoy por Hoy...